donostia - Las familias que adquirieron en su momento aportaciones subordinadas de Eroski pueden ya canjear la deuda perpetua por bonos de vencimiento a doce años y dinero en metálico asumiendo una quita del 30% en la inversión inicial. La cooperativa vasca publicó ayer en el Boletín Oficial del País Vasco un anuncio en el que daba cuenta de la apertura del proceso de canje voluntario del controvertido producto financiero. De este modo, se abre definitivamente la puerta para que los titulares de las aportaciones que así lo deseen se adhieran al mecanismo diseñado por el Instituto Vasco de Consumo (Kontsumobide), que actuó como mediador y dictó un laudo en enero de 2014.
El cumplimiento de la decisión de Kontsumobide estaba ligado al proceso de refinanciación de la deuda de Eroski y el acuerdo con los bancos que se firmó a finales de julio. Cerrado ese frente, la cooperativa da ahora el paso final para realizar una permuta que, en líneas generales, no convence a los inversores por la pérdida que deben asumir si quieren poner fecha de caducidad a las aportaciones.
Como ha ocurrido con operaciones similares de otras empresas, entre ellas, otra cooperativa de Mondragon, Fagor; las aportaciones financieras subordinadas de Eroski (AFSE) no establecen un periodo de vida de la inversión. Es el titular el que debe hacerla efectiva vendiéndosela a un tercero. Hay numerosas sentencias que consideran que esa letra pequeña no estaba suficientemente explicada en las operaciones de comercialización.
El caso es que aunque los titulares de las AFSE han querido desprenderse de ellas y han litigado para conseguirlo, Eroski ha seguido pagándoles los intereses que generaban sus aportaciones. De ahí que Kontsumobide promoviera una solución con una quita de casi un tercio de la inversión inicial buscando un punto intermedio, que solo ha sido bien acogido por la empresa.
los pagos y la quita El mecanismo de canje al que pueden acogerse las familias contempla una devolución en metálico del 15% del dinero. Un 55% se permuta por obligaciones subordinadas de Eroski que, al contrario de las aportaciones, tienen una duración preestablecida. La cooperativa devolverá el dinero en un plazo de 12 años y pagará anualmente los intereses que se generen. El resto, un 30%, se asume como pérdida por parte de los inversores. Según este esquema y tomando como referencia la inversión mínima de 1.000 euros -40 AFSE a 25 euros cada una-, los titulares cobrarán ahora 150 euros y 700 dentro de doce años, con una quita de 300 euros.
Sin embargo, según las asociaciones de afectados, la inversión media se sitúa en 20.000 euros, con lo que la pérdida rondaría los 6.000 euros por hogar. Además, muchas de las personas que adquirieron el producto financiero lo hicieron de cara a su jubilación. Así, también según las asociaciones de afectados, en el tramo de edad por encima de los 65 años la inversión media fue de 50.000 euros. En su caso, la quita sería de 15.000 euros.
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millones de euros suman las cuatro emisiones de aportaciones financieras lanzadas por Eroski entre 2002 y 2007. Las asociaciones de afectados calculan que cerca de 30.000 personas están ‘atrapadas’ por las AFSE. El canje. La permuta promovida por Kontsumobide consiste en recuperar ahora un 15% de la inversión y otro 55% dentro de 12 años, en una operación que supone perder un 30% del dinero.