donostia - Las grandes empresas vascas ostentan el dudoso honor de ocupar el último puesto a nivel estatal en cuanto al grado de cumplimiento de la ley que les obliga a tener un 40% de representación femenina en sus consejos de administración. Tan solo un 8,79% de firmas de la CAV obligadas por ley a cumplir este cupo lo respeta a escasos meses de que finalice el plazo para que todas ellas hayan cumplido sus deberes.

Tras quedar cuestionado el legendario carácter emprendedor vasco en un reciente estudio de la asociación internacional GEM, llega ahora un informe que pone en evidencia la voluntad o capacidad de fomentar la igualdad de las grandes empresas de la CAV. La Asociación de Profesionales y Empresarias de Gipuzkoa Aspegi es su principal impulsora con la colaboración de la Diputación Foral de este territorio histórico, mientras que Prospektiker se ha encargado de coordinarlo.

La vicepresidenta de la asociación empresarial, Nerea Ibañez, presentó ayer este estudio en el que destaca el escaso grado de capacidad por parte de las grandes compañías vascas para incrementar la presencia de directivas y mostró su preocupación porque la tendencia no es positiva. De hecho, a principios de año Ceuta ocupaba el último puesto, pero Euskadi ha conseguido desbancarla con un porcentaje inferior a nueve puntos cuando la media estatal se sitúa en un también desolador 12,19%.

La ley se aplica a aquellas compañías que deben presentar las cuentas de pérdidas y ganancias de manera no abreviada, que corresponde a aquellas con un fuerte volumen de negocio y que en la CAV representan una de cada cuatro empresas activas. También establece un plazo para que se alcance el mínimo del 40% establecido y finaliza este 2015.

Sin embargo, tal y como advirtió Nerea Ibañez, los tiempos corren y la situación vasca dista mucho de ser la ideal. “No parece muy probable que vayan a conseguir cumplir la ley”, afirmó para tildar de “preocupante” una situación que “hasta a nuestra misma asociación ha sorprendido”.

Si bien a nivel vasco los números son los más bajos del Estado, la situación se agrava en el caso de Gipuzkoa, donde “es casi anecdótico” encontrar una gran empresa que tenga en su consejo de administración un 40% de mujeres. Según indicó la vicepresidenta de Aspegi, grandes firmas como CAF, Irizar o Ulma carecen de presencia femenina entre sus órganos directivos, mientras que la patronal empresarial Adegi cuenta con una única vicepresidenta, mientras que su presidente, secretario general y otros dos vicepresidentes son hombres.

Ante esta situación, Aspegi ha promovido una guía que recoge una serie de recomendaciones para igualar las condiciones de acceso de las mujeres a los consejos de administración y puestos directivos de las empresas.

Su intención no es llegar tan solo al ámbito económico, sino que se dirige a muy diferentes sectores como la sociedad, la administración o los medios de comunicación con el objetivo de incrementar la concienciación y conseguir que “el 91,21% de las empresas restantes implanten las medidas necesarias para cumplir la ley”.