La borrasca Benjamín ha dejado numerosas huellas en Donostia, entre estas el derribo o el daño causado a “entre 20 y 30 tamarindos”, según han explicado desde el área de Mantenimiento Urbano del Ayuntamiento de Donostia.
Los fuertes vientos hicieron que “se cayeran o rompieran” más de una veintena de ejemplares de tamariz, que es el nombre correcto para identificar la especie de árbol que es una de las señas de identidad de la línea de costa donostiarra.
A lo largo de la tarde del jueves y durante la mañana del viernes, operarios municipales procedieron a eliminar las ramas dañadas, cuando eso era posible, o a acabar de talar el árbol dañado con el objeto de evitar riesgos a viandantes, ciclistas y otro tipo de vehículos.
Numerosas incidencias
La borrasca Benjamín dio mucho trabajo a los servicios de emergencia durante la jornada del jueves, dado que desplazó numerosos elementos del mobiliario urbano, provocó la caída de ramas y derribó motos y bicicletas.
Los Bomberos de Donostia llevaron a cabo alrededor de 30 intervenciones por árboles y ramas caídas, cascotes, aleros, etc.; sin que se tuvieran que lamentar daños personales.
Los principales parques de la ciudad, tuvieron que cerrar parcial o totalmente, así como el Paseo Nuevo. También se prohibió el acceso al Peine del Viento y al espigón de La Zurriola.