Donostia, aunque poco, sigue creciendo y cerró el año 2024 con 189.866 habitantes, un 0,4% más que en 2023. Al sumar 772 , Donostia logró su máximo histórico en población. El alcalde, Eneko Goia, ha sido el encargado de desgranar los datos demográficos, destacando que la ciudad “sigue en la dinámica de los últimos años”, con un sostenido crecimiento “no muy rápido” que se explica “gracias la migración, no por nacimientos de autóctonos”.
En los últimos diez años, ha apuntado, se ha mantenido esa tendencia al crecimiento, excepción hecha de los tiempos de pandemia.
“El relevo generacional se da por las personas que llegan del extranjero”, ha insistido Goia. Las contrataciones, ha apuntado, evidencian esta realidad, ya que con el descenso de la natalidad la llegada de personas migrantes ha permitido suplir carencias.
“Esta ciudad ofrece oportunidades y es previsible que esta tendencia siga al alza”, ha avanzado,
La media de edad se ha mantenido, también gracias a la migración. A 31 de diciembre la edad media en la ciudad era de 47 años. En el caso de las mujeres era de 49 y de 45 en el caso de los hombres.
En Donostia viven más mujeres que hombres, ya que suponen el 52,6% del total. Además, viven más, ya que el 58% de la población de más de 65 años son mujeres. La brecha aumenta con la edad, y entre la población mayor de 80 años el 66% son mujeres.
Por barrios
En el análisis por barrios no hay “grandes novedades”. Amara Berri sigue siendo el barrio más poblado de la ciudad, con 30.244 habitantes, el 15,9% de la población total. Le sigue el Centro, con 22.517 habitantes y Altza, con 20.162. Si a estos tres barrios se les suma Gros, se llega casi a la mitad de la población de Donostia, un 48%.
En la cola, con menos habitantes, se sitúa Zubieta, con 317, un 0,2% de la población; seguido de Igeldo, con 1.125 y Miramon-Zorroaga, con 2.475.
Loiola fue el barrio que más creció el pasado año, con 295 nuevos habitantes. Por contra, Gros fue el que más vecinos perdió, 109.
Entre los barrios que perdieron población se hallan también El Antiguo, Ibaeta y Ategorrieta-Ulia, mientras que el Centro, Intxaurrondo y Altza ganaron habitantes.
Loiola, ha abundado, seguirá creciendo los próximos años, “porque los principales desarrollos de vivienda están allí”.
El Centro ha seguido ganando vecinos. Hay que tomar en cuenta, ha recordado Goia, que en este barrio ha habido una nueva promoción, la de San Bartolomé.
Población extranjera
El 10,6% de la población es extranjera, con 859 personas más que en 2023. Cada año Donostia cuenta con más vecinos llegados de otros países y el 2024 sumó a 859 personas, siendo ya 20.167 las censadas en la ciudad: 10.203 hombres y 9.964 mujeres.
Sobre el origen de estas personas “se ha dado un cambio”. En la actualidad Honduras es el país de origen mayoritario como lo viene siendo los últimos años, con 2.425 personas. Pero, ha destacado el alcalde, Colombia, con 1.942 personas, ha pasado a Nicaragua, 1.828.
Este dato, ha insistido, responde a una realidad que se viene constatando los últimos años, ya que en 2023 Colombia superó a Marruecos.
“La llegada de ciudadanos y ciudadanas de Colombia a nuestra ciudad en los últimos años está siendo muy notable”, ha abundado Goia.
Las poblaciones por origen que más han crecido han sido Colombia, que suma 184 ciudadanos; Marruecos, con 144 más; Argelia, 127 más; Perú, de donde llegaron 77 personas más, y EEUU, con 66 personas más.
“Hay un dato que a mí me gusta destacar, que es el de las personas que llevan ya tiempo viviendo aquí y han conseguido la nacionalidad. En total son ya 29.875”, ha señalado Goia.
“Es una cifra importante, récord, que ha tenido un gran crecimiento, un 6,45% más que en 2023. Las previsiones son que esta tendencia seguirá al alza y eso supone una transformación de la ciudad, en todos los sentidos”, ha añadido. “Todo tiene su lógica, porque el índice de envejecimiento es mayor y el de natalidad desciende, por lo que se suple esta carencia con personas llegadas del extranjero”, ha reflexionado Goia.
Natalidad
Si hay un dato que preocupa es el de la natalidad, que sigue siendo muy baja y desciende. En 2024 fue del 5,66, frente al 5,69 el año anterior. El pasado año nacieron en la ciudad 1.052 niños y niñas, frente a los 1.079 de 2023.
Este dato evidencia que la evolución de la demografía “viene de la mano de la migración”, ha repetido el primer edil donostiarra.
La tasa de envejecimiento, por contra, aumenta y se sitúa en 219, 8.5 puntos más que en 2023. ¿Qué quiere decir ésto? Que en Donostia hay 2,19 personas mayores de 65 años por cada persona menor de 15 años.
Los barrios más envejecidos son el Centro y, especialmente, Gros. En el polo opuesto se sitúan Loiola y Añorga.
Más de la cuarta parte de la población de Donostia, el 26,15%, superan los 65 años, cifra que sigue creciendo. El 8% de las y los donostiarras tienen más de 80 años y 118 personas, más de 100; siendo la de mayor edad una persona con 113 años.
Goia ha reconocido que la administración municipal no es la que dispone de más mecanismos para incentivar la natalidad, aunque trabaje para facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar, por ejemplo, ampliando la red de haurreskolas