Si hay una tradición entre las tradiciones en la Semana Grande de Donostia, es acudir a disfrutar de los fuegos artificiales y tomar un helado.

La ciudad de Donostia, con su encanto costero y su vibrante ambiente, es un destino turístico de primer nivel en cualquier época del año. Pero más allá de sus playas y pintxos, la ciudad guarda un secreto dulce y refrescante: sus heladerías.

Estos establecimientos, que durante los meses más cálidos de verano se convierten en auténticos templos del placer, ofrecen una amplia variedad de sabores que satisfacen los paladares más exigentes.

Pero, durante Aste Nagusia, hay que tomarse las cosas con calma, porque para obtener la recompensa de disfrutar de un helado hay que aceptar que, sí o sí, es necesario pasar un buen rato esperando en la cola.

En este reportaje, nos sumergiremos en el mundo de las heladerías más señeras de Donostia: Heladería Arnoldo y Gelatería Boulevard, para descubrir sus secretos, sus sabores más populares y los desafíos a los que se enfrentan.

Heladería Arnoldo

La Heladería Arnoldo proviene de una pequeña ciudad bellunense del norte de Italia: Longarone, en la región de Vénetto. Su tradición heladera, tal y como dicen en su página web comienza en Graz, Austria. En 1935 se trasladaron definitivamente a Donostia donde, en 1948, Livio Arnoldo se instala en la calle Garibai 2, la actual sede. A día de hoy, consta de siete establecimientos a lo largo de Donostia (consúltalos aquí).

Gelatería Boulevard

La Gelatería Boulevard cuenta con tres locales, que se encuentran en la Alameda del Boulevard y el edificio Kursaal. Así se presentan en su página web: "Nuestras heladerías son el lugar ideal para saborear exquisitos helados artesanales en un ambiente relajado y acogedor esforzándonos por brindar la mejor experiencia posible a nuestros clientes".

Su filosofía es la de "tratar de vender una experiencia integral. Vendemos felicidad". Su objetivo con el cliente es que "se lleve un trato agradable y la experiencia sea completa".

Boulevard Gelatería gelateriaboulevard.es

"Clásicos" para los sabores

Los amantes del helado tienen una clara preferencia por los sabores clásicos: el chocolate, vainilla, limón, yogur y la avellana siguen siendo los más demandados en estas heladerías. Sin embargo, según nos ha podido declarar Marta Arnoldo, las heladerías de la ciudad se han adaptado a los nuevos tiempos y ofrecen una amplia gama de sabores innovadores, como los inspirados en frutas exóticas, como el mango o el coco.

Para Ignacio Martínez, de Gelatería Boulevard, el sabor más popular de su local es el de Kinder Bueno y también el de Oreo. Pero coincide con Marta Arnoldo, dado que los sabores tradicionales y clásicos nunca pasan de moda: "Se piden mucho también los clásicos: chocolate, yogur, limón, vainilla…".

Diferencia de criterios

Los gustos de los donostiarras en cuanto a helados suelen ser más clásicos y tradicionales que de los visitantes. Pese a todo, según Marta Arnoldo, la diferencia más grande entre turistas y locales está en el tamaño del helado que adquieren. Mientras que los locales "piden helado de tamaño más pequeño porque viene casi todos los días, los turistas, que vienen más de paso, piden cantidades más grandes". Eso sí, además, valoran la calidad de los ingredientes y la elaboración artesanal.

Ignacio Martínez ha observado que en los últimos años, el helado de pistacho es un sabor que está en auge, sobre todo entre los locales. Mientras que los turistas, principalmente norteamericanos, se decantan mucho por el de menta y chocolate.

Otra diferencia radica en que los turistas muestran una mayor curiosidad por sabores exóticos y combinaciones originales. Les atraen los helados que incluyen frutas tropicales y exóticas como el mango. También, según la heladería Arnoldo, "los turistas experimentan un poco más. Piden más toppings, galletas... y que tengan mucha densidad".

Al turismo sudamericano, añade, "le gusta más el dulce de leche, mango, coco… sabores más exóticos".

Gente consumiendo helados en Donostia Pedro Martinez

El verano se nota en la caja

Esta diversidad de gustos ha llevado a las heladerías donostiarras a ofrecer una carta cada vez más amplia, teniendo cada heladería más de 45 sabores, satisfaciendo así los paladares de locales y visitantes por igual.

La facturación de las heladerías donostiarras experimenta una notable subida durante los meses de verano, en especial en julio y agosto, mes en el que "influye mucho la Semana Grande", subraya Marta Arnoldo. Los mejores meses, en general, suelen ser julio y agosto, aunque "depende mucho del tiempo". En este último mes, agosto, como dice Marta Arnoldo, "influye mucho la Semana Grande".

Pese a todo, los establecimientos como Arnoldo han encontrado formas de mantener su actividad durante el resto del año, ofreciendo productos como "creppes, gofres y batidos", añade.

Desde Gelatería Boulevard ven el verano y, sobre todo, la Semana Grande como la mejor época en cuanto a ventas y trabajo: "Para nosotros es la semana en la que giramos. Esperamos muchísimo trabajo".

Como en Italia

"La materia prima es lo que siempre prevalece"

Y es que los helados de Donostia no tienen nada que envidiar a los de las heladerías más famosas de Italia o Francia. Lo que importa es la propia "materia prima" y la calidad con la que trabajes. Así opina Arnoldo: "Te puedes encontrar de todo en todos los sitios. Depende las materias primas que utilices. La materia prima es lo que siempre prevalece", destaca Arnoldo.

En la misma línea se pronuncia Ignacio Martínez, de Gelatería Boulevard: "Nosotros nos centramos en mejorar nuestras recetas, y las críticas que recibimos, en general, son buenas".

Gente consumiendo helados en Donostia Pedro Martinez

El impacto de la inflación

Lo cierto es que la inflación ha afectado a todos los sectores, y las heladerías no han sido una excepción. El aumento de los costes de las materias primas ha obligado a muchos establecimientos a revisar sus precios. Así lo cuenta Marta Arnoldo: "Intentamos compensar unas cosas con otras pero, al final, toca subir los precios".

"De vez en cuando toca hacer una subida proporcionada"

Ignacio Martínez se pronuncia de forma muy similar en cuanto a la inflación y sus efectos: "De vez en cuando toca hacer una subida proporcionada", reconoce.

Sin embargo, los donostiarras y quienes visitan la cuidad siguen mostrando su pasión por el helado y están dispuestos a pagar un poco más por disfrutar de un producto de calidad.

Más que un negocio

Las heladerías de Donostia son mucho más que simples negocios: son lugares donde disfrutar de un momento de placer, donde saborear la tradición y la innovación, y donde experimentar con nuevos sabores. Gracias a su oferta variada y a la calidad de sus productos, estas heladerías se han convertido en un referente en el sector y contribuyen a hacer de Donostia una ciudad aún más atractiva.

Horario Arnoldo

  • De lunes a viernes: de 08:00 a 23:00
  • De viernes a domingo: de 08:00 a 01:00

Horario Gelatería Boulevard

  • De lunes a domingo: de 11:00 a 23:00