El local hostelero del paseo de la Zurriola, que se denominará Zmare, está estos días inmerso en plenos trabajos, con el objetivo final de abrir sus puertas a lo largo del mes de junio. Un letrero con el nuevo nombre cuelga ya del edificio, aunque no será el definitivo, que tendrá un tamaño superior.

“Sería una pena que perdiéramos otro verano más”, señaló a este periódico Mikel Ubarretxena, integrante de la UTE Zurriola Ocean Center, que se hizo con la gestión del establecimiento, cerrado desde 2016.

“Queremos abrir lo antes posible y vamos a toda marcha con la intención de hacerlo en junio, aunque tenemos cierta preocupación con el hecho de que los permisos necesarios de Costas lleguen a tiempo”, confesó el hostelero.

El nuevo ZMare será en principio un establecimiento de día, y no tendrá discoteca, como acogió en el pasado. Sin embargo, será también apto para fiestas privadas, incluidas las nocturnas, en momentos señalados del año, como los distintos festivales que se desarrollan en Donostia, o cuando colectivos y empresas así lo soliciten. La iluminación interior del establecimiento está preparada para acoger los eventos nocturnos.

Dos terrazas

El bar restaurante, además, contará con dos terrazas, una de ellas cerrada, donde se servirán comidas, y otra al descubierto, que será más informal, según explica Ubarretxena.

El establecimiento dará trabajo a más de 70 personas, un elevado número de empleados necesario para cubrir los distintos turnos.

Operarios trabajan en el edificio que cerró en 2016. Iker Azurmendi

Tras el cierre de local del ZM, en 2016, el Ayuntamiento sacó a concurso la gestión de la instalación pero el profesional que resultó adjudicatario del espacio se echó atrás al tener que invertir más dinero en reformar el local que el inicialmente previsto.

El nuevo Zmare contará con más de 70 trabajadores y no tendrá discoteca, aunque podrá acoger fiestas privadas

Después, el Ayuntamiento volvió a sacar a concurso el edificio y fue adjudicado n 2022 al grupo de hosteleros locales, que dieron comienzo a la rehabilitación del inmueble el pasado mes de diciembre. Las obras de reforma cuestan unos 710.000 euros, de los que el Ayuntamiento aportará un máximo de 300.000, mientras que el resto correrá a cargo de los gestores. 

Además de la zona de hostelería, el edificio contará con una academia de socorrismo y otras prácticas relacionadas en el mar.