La asociación de defensa del patrimonio Áncora recordó este miércoles en un comunicado que la licencia de primera utilización del hotel Nobu, cerrado por el Ayuntamiento por no contar con ella, está “supeditada” al plan Especial de Patrimonio Urbanístico Construido (Peppuc) por ser un edificio catalogado.
La entidad rechazó así que la clausura del hotel obedezca a factores diferentes a los relacionados con la protección del patrimonio. “El alcalde ha evitado en todo momento hablar de patrimonio arquitectónico y asegura que el cierre del establecimiento obedece a otros factores distintos, como haber operado sin licencia de primera utilización”, señaló Áncora. Pero, añadió, “la concesión de licencia de primera utilización se encuentra supeditada a la verificación previa del cumplimiento del Peppuc”.
La asociación dijo entender que el alcalde “no tenga un conocimiento profundo de la normativa urbanística, debido a sus múltiples ocupaciones” y añadió que “las infracciones han sido múltiples y notorias” en el edificio de la antigua Vista Eder de Miraconcha.
Según Áncora, en el hotel Nobu hay un levante no autorizado en el Peppuc, se han derribado fachadas catalogadas, se han destruido “elementos permanentes”, se ha alterado la imagen arquitectónica protegida, se ha modificado la morfología de la cubierta, se ha producir un “incremento edificatorio clandestino” y se han incumplido las condiciones de las licencias urbanísticas de derribo y de obra mayor, así como la modificación de una de ellas.
“Semejante cúmulo de ilegalidades no resulta fácilmente subsanable: la restauración de la realidad física alterada requerirá de obras costosas (demoler lo ilegalmente construido, restituir elementos originales suprimidos, etc.) exigiendo la tramitación de un expediente de disciplina urbanística, por lo que difícilmente podrá obtenerse la reapertura del local a corto plazo”, asegura Áncora.
La asociación, además, criticó “las descalificaciones del alcalde, quien lejos de agradecer la labor desinteresada de las entidades de defensa del patrimonio se dedica a desprestigiarlas ante los medios de comunicación, afirmando que 'No me parece que Áncora sea la autoridad más reconocida a tener en cuenta'”.
En este sentido, Áncora señala que “dispone de la cualificación pertinente avalada por su trayectoria, no en vano cuenta con la Medalla al Mérito Ciudadano y ha sido designada por el propio Ayuntamiento como integrante del Consejo Asesor de Patrimonio Local, organismo constituido por un reducido grupo de expertos”.
Además, la entidad dice que "es lamentable que se llegue a estas situaciones por una falta de vigilancia municipal y que sean los ciudadanos quienes tengan que denunciar ejerciendo la necesaria función de control, que por ley corresponde asumir al Ayuntamiento".
Finalmente, asegura con ni ha pedido ni desea el cierre del hotel Nobu, pero sí reclama "el cumplimiento íntegro de la normativa de protección de patrimonio y se opone a la doble vara de medir del Departamento de Urbanismo, que se muestra intransigente con los particulares que realizan pequeñas reformas en sus viviendas, tolerando cualquier anomalía cuando se trata de grandes inversores o cadenas hoteleras".
