La temporada de playas de Donostia, que se cierra este sábado tras cuatro meses, ha sido “positiva”, con una “afluencia de personas media-alta”, según señaló ayer el concejal de Mantenimiento y Servicios Urbanos, Carlos García, que dijo también que “ha habido bastantes quejas de bañistas por el poco espacio para el baño” en la playa de la Zurriola, donde se distribuyen los espacios para que estén separados bañistas y surfistas. A pesar de las quejas de los bañistas, no se registraron problemas para la práctica del surf, indicó el corporativo.
En su balance de la temporada, García recordó que este año se ha caracterizado por la presencia de carabelas portuguesas y medusas, lo que provocó la aprobación de un nuevo reglamento “que ha funcionado bien”. El número de ejemplares de carabelas retirados por la barca que limpia la bahía rondó los 300.
El tiempo meteorológico no ha aconsejado acudir a las playas en distintas jornadas del verano, lo que mermó las cifras del balance. Por ejemplo, la cantidad de residuos recogidos en los arenales ha sido menor que el pasado año, “seguramente porque la climatología ha reducido el número de días soleados y la afluencia de usuarios”.
De hecho los residuos recogidos por los operarios de limpieza fueron menos que el año anterior. Se trasladaron 422.955 kilos de distintos tipos de restos, un 18% menos que el pasado año.
ASISTENCIAS DE LOS SOCORRISTAS
Asistencias por carabelas y medusas. Los servicios de Salvamento y Socorrismo llevaron a cabo 821 asistencias sanitarias, mientras el pasado verano fueron 1.131. En Ondarreta y la isla se registraron 304, en la Concha 365 y en la Zurriola 152.
Rescates. Hubo 39, menos que la mitad que el pasado verano, cuando fueron 93. En La Zurriola fueron este año 28, en Ondarreta, seis, y en La Concha, cinco.
Evacuados. Se evacuaron 79 personas a centros sanitarios, más que las 67 del pasado año, la mayoría en La Concha (40). En la Zurriola hubo 31 y en Ondarreta, ocho.
Extraviados. Las personas extraviadas este pasado verano, fundamentalmente niños, fueron 81, mucho menos que los 215 del verano anterior. En La Concha fueron 50, en la Zurriola, 16, y en Ondarreta, 15.
Baño asistido. Esta opción disponible en La Concha para personas con discapacidad fue utilizada en 280 casos, mientras que el verano anterior fueron 394.
Además, este año se quedaron 73 parasoles libres. “El servicio finalizó el pasado 17 de septiembre y solo 73 de estos elementos han estado este año sin abonos, fundamentalmente en la playa de la Zurriola, aunque todos los que estaban libres se ponían diariamente en alquiler a quienes solicitaban”, recordó García.
También se apreció una disminución en el número de usuarios de las cabinas de las playas a lo largo de la temporada. En La Concha se registraron 8.574, más de un millar menos que el verano pasado. En Ondarreta fueron 2.894, también más de un millar menos, y en la Zurriola, 1.346, 300 menos.
Con el final de la temporada de playas desaparecerán tanto el balizamiento del agua como los gabarrones, las torretas de vigilancia de los socorristas y otros servicios.
Perros
Por el contrario, los perros volverán a poder bajar a los arenales a partir del domingo. El Ayuntamiento recuerda la obligación de recoger los excrementos y las multas de entre 50 y 200 euros que se pueden imponer.
