La comunidad educativa del Conservatorio Profesional Maestro Escudero, situado en la calle Easo, ha vuelto a hacer pública su protesta por la situación de las instalaciones que, según su queja, “incumplen lo que dice la ley”, por lo que, dicen, se ha “agotado” ya su paciencia. Asimismo, se queja de “discriminación” frente a los demás conservatorios de la red pública de Bizkaia y Araba “que cuentan con infraestructuras adecuadas”.
Profesores y otros trabajadores del Conservatorio donostiarra han dado a conocer un escrito para quejarse de la situación, que ha ido sacando a la luz en los últimos años. Ahora, la comunidad educativa de este centro de referencia del estudio de la música para toda Gipuzkoa asegura que en el edificio sigue habiendo “falta de accesibilidad”, ya que no existe ascensor y el montacargas requiere entrar por un patio, “e incumple todas las normativas de seguridad” porque hay una única escalera que, en caso de incendio, impide salir por otro lugar, entre otros problemas.
Los trabajadores, incluido el equipo directivo del centro, se siguen quejando de que no hay una sala de ensayos apropiada ni un auditorio. Tampoco existe insonorización ni climatización adecuadas, según su denuncia. Por todo ello, han convocado una concentración en Alderdi Eder el viernes 28 a las 12.00 del mediodía para expresar su malestar.
En su escrito, la comunidad educativa del Conservatorio donostiarra critica la falta de una solución consensuada entre el Ayuntamiento y el Gobierno Vasco que “llegan a acuerdos para encontrar en la ciudad huecos para todo tipo de proyectos educativos excepto para el Conservatorio”, en alusión a la decisión de localizar una segunda sede del Basque Culinary Center en la parcela municipal de Manteo.
La comunidad educativa rechaza esperar a que se construya otro edificio en la playa de vías del Topo, más allá de 2030
Miembros de la comunidad educativa de Maestro Escudero recuerdan también que el Conservatorio Superior de Música de Euskadi, Musikene, ubicado Benta Berri, pertenece a una fundación privada financiada con dinero público y cuenta con todas las necesidades cubiertas.
Sin embargo, contraponen la situación con la del Conservatorio de la red pública que sigue sin mejorar, más allá de las labores de limpieza, pintura y arreglo de algunas estancias que, sin embargo, siguen siendo escasas para la labor, según la queja de la comunidad educativa.
La falta de acuerdos entre las dos instituciones implicadas en el centro están en el origen de que este no pueda hacer frente a sus problemas, añaden. Por ello, además, no pueden acoger a más alumnos, como sucede en Bilbao y Vitoria.
En el conservatorio donostiarra, 400 estudiantes acuden a aprender instrumentos y distintas disciplinas musicales, pero podrían ser 600, como en los otros centro vascos, si las instalaciones estuviesen completas.
Nuevo edificio
La parte del edificio Easo en la que se encuentra el Conservatorio Maestro Escudero pertenece a Educación del Gobierno Vasco desde hace 24 años, mientras que el resto de la manzana es propiedad del Ayuntamiento. La comunidad educativa defiende que si la administración local cediese una planta, la ocupada actualmente por el departamento municipal de Proyectos y Obras, y se construyese un piso más (como permite la normativa) sobre la antigua sede de los bomberos de al lado, el Conservatorio Maestro Escudero podría mejorar sus prestaciones al contar con más aulas y un auditorio.
Sin embargo, según sostiene el profesorado, el Ayuntamiento rechaza esta opción ya que en sus planes está trasladar el conservatorio profesional al futuro desarrollo edificatorio previsto en la actual playa de vías del Topo junto a la plaza Easo. La solución, sin embargo, no gusta al centro porque alargaría la actual situación más allá del año 2030.
