Síguenos en redes sociales:

ZONAS VERDES

La reforma del vivero de Putzueta en Donostia prevé crear un laboratorio apto para visitas

La reforma del vivero de Putzueta en Donostia prevé crear un laboratorio apto para visitasIker Azurmendi

La reforma del vivero de plantas ornamentales del Ayuntamiento de Donostia ubicado en el camino de Putzueta, en la zona verde de Lau Haizeta, junto a Altza, será remodelado tras largos años de uso con el fin de modernizar sus instalaciones y mejorar su funcionamiento. 

La instalación será dotada de un laboratorio didáctico y divulgativo para potenciar sus actividades. El recinto, además, contará con las medidas necesarias para recibir a grupos y desarrollar talleres prácticos. Para ello, se suprimirán las barreras arquitectónicas y se cuidará su funcionamiento medioambiental y aspecto estético.

Así lo explica el Plan Director del Vivero Municipal de Putzueta elaborado por el arquitecto Fermín González Blanco por encargo del Ayuntamiento. El trabajo contempla ampliar un 42% la superficie productiva para optimizar el espacio, entre otros cambios. Las labores de mejora propuestas en el documento tienen un presupuesto de 532.382 euros. 

Por las instalaciones de Putzueta pasan cada año miles de plantas de toda clase, que se compran en el mercado internacional, generalmente a Holanda. Las plantas llegan en sus primeras fase de desarrollo, en su etapa de plántula, para después crecer antes de ser trasplantadas a los jardines.

Tras contar con el Plan Director el pasado año, el Consistorio sacó a concurso la redacción del proyecto de ejecución de las actuaciones previstas, un documento que tiene un coste de licitación de 82.600 euros y será adjudicado próximamente.

Tras su aprobación, se podrá encargar la obra de transformación del vivero municipal, un recinto de unos 41.000 metros cuadrados, la mitad de los cuales tienen pendientes de más de un 30%, por lo que no tienen uso productivo para vivero, aunque su superficie está ocupada por árboles.

El terreno restante está destinado a la producción vegetal para proporcionar flores, plantas, arbustos y árboles a las zonas verdes de la capital guipuzcoana. En total, la ciudad cuenta con 3,7 millones de metros cuadrados de zonas ajardinadas y 33,2 millones de áreas de vegetación arbustiva y arbolado. Además, hay otros 32.720 metros cuadrados de zonas de juegos infantiles y 19.689 metros cuadrados de alcorques (espacio para plantar los árboles en la zona urbana).

Los cambios previstos tras la reforma del vivero de Putzueta persiguen reorientar y potenciar los trabajos que tienen lugar en el lugar, donde el Ayuntamiento hace crecer los distintos tipos de vegetales antes de trasplantarlos a los jardines y zonas verdes del término municipal.

Para ello, se llevarán a cabo acciones destinadas a mejorar la productividad del propio vivero. Por ejemplo, se creará una nueva zona dedicada al acopio y aviveramiento de arbolado. De hecho, en la actualidad, el Ayuntamiento utiliza un terreno junto a la cárcel de Martutene para el crecimiento de árboles, aunque este espacio desaparecerá una vez sea trasladada la prisión y se construya la segunda fase de Txomin Enea.

El plan para Putzueta contempla también crear nuevas líneas de plantas vinculadas a jardines de agua, así como zanjas de depuración y filtrado y una mejora de los procesos de compostaje.  

Uno de los invernaderos del vivero de Putzueta.

Según el Plan Director, la instalación está aquejada de distintos problemas. Entre ellos, que las zonas de ubicación de las plantas y de los materiales se encuentran mezcladas y no están bien diferenciadas; que algunas zonas del vivero están ocupadas con materiales de arbolado, lo que ofrece una primera impresión negativa para los visitantes; y que hay falta de espacio en zona sombría, por ejemplo.

También hay problemas relacionados con las plantas, arbustos y árboles. “Descontrol en la distribución” de estos elementos y “falta de labores de previsión”, según indica el documento, que destaca especialmente la acumulación de plantas en el vivero y la falta de espacio para los árboles, que han sufrido caídas.

El Plan Director recalca también que hay acumulación de materiales en el vivero ya que, desde 2020, “ no se desecha nada, con el objetivo de poder aprovecharlo en un futuro”, por lo que todo está guardado en un almacén. Los cambios previstos persiguen eliminar estos problemas y dejar la instalación dotada de los sistemas necesarios de cuidado medioambiental y eficiencia en la producción.