En pleno corazón de la calle Matia, en el número 11 que antaño albergó comercios tan dispares como una pescadería o una tienda de fotografía, se halla La Jabonería de Matia. Este establecimiento, regentado por Raquel de Bartolomé, madrileña de nacimiento y antiguotarra de adopción desde el año 2004, lleva desde junio de 2021 ofreciendo a su clientela jabones sólidos y detergentes a granel. Concienciada con la sostenibilidad y con una filosofía dirigida a crear el menor residuo posible, este comercio acaba de ser nombrado Singular Denda 2023 por la Federación Gipuzkoa Merkatariak.

La Jabonería de Matia acaba de conseguir la distinción Singular Denda 2023. ¿Contenta?

Muy contenta, porque ha sido un camino bastante bonito; ha sido duro a veces, pero es un reconocimiento que nos viene fenomenal. Pensamos que somos bastante singulares y únicos en Donostia, tanto por nuestra línea de productos como por nuestro servicio al cliente, y eso es lo que creo que se reconoce.

¿Cómo surge la idea de crear este negocio?

La idea del negocio surge en la pandemia; fue un tiempo de reorganización, de pensar en el futuro, de qué vamos a hacer ahora, a partir de aquí. Yo siempre había estado interesada en la sostenibilidad, el reciclaje, la cosmética sólida. Me empecé a informar, hicimos un plan de negocios, vimos que era posiblemente factible y nos pusimos a ello. En junio hacemos dos años y hemos tenido una progresión, tanto de productos como de filosofía. 

¿Y cuál es esa filosofía?

Nuestra filosofía es lo que ahora está de moda y se conoce como slow shopping, que es un comercio más pensado, que cuida los detalles, que escucha al cliente. Hay una experiencia de compra implícita, no sólo te vendo tal cosa; me ocupo de que esto sea realmente lo que necesitas. Y también está encaminada a la sostenibilidad, a la reutilización, a no utilizar cosas para una sola vez. En esa línea nos movemos, siempre cuidando cierta estética, cierta personalidad de la tienda. 

¿Qué tipo de productos venden?

Hay dos líneas fundamentales. Una es lo que es la higiene personal y la cosmética natural y luego está la limpieza a granel. En la cosmética natural e higiene personal están los jabones, que son completamente artesanos, hechos con aceite de oliva y aceites esenciales; sustituyen al gel líquido de supermercado, que tiene un montón de sulfatos y de cosas que no son buenas para la piel. Luego, tenemos una cosmética natural, certificada, una línea de geles, champús… Por último, resumiendo mucho, está el producto de limpieza a granel, que es completamente ecológico. Tenemos muchísimos tipos de detergentes, de limpiadores, de bicarbonato, de vinagre de limpieza, volviendo a la limpieza menos dañina para el medio ambiente, más ecológica. Además, tenemos otros productos, como velas artesanas, bombas de baño, esponjas naturales… Todo enfocado a cuidarse y cuidar el medio ambiente.

Lo que más llama la atención es el detergente a granel, que no es tan común encontrarlo… 

No hay muchos negocios en Donostia que tengan esta opción, pero nosotros hemos hecho una apuesta a futuro. Tenemos varios productos de ese tipo y vamos a ello. 

Estos detergentes no vienen en un envase; ¿cómo se los lleva la clientela a casa?

La idea es, precisamente, reciclar envases. Es decir, si has utilizado un detergente de supermercado, se te ha terminado y quieres optar por esta visión, te vienes con el bote, yo descuento el peso del envase y cobro el líquido. Lo que se cobra es exactamente lo que se llevan y no hay una cantidad mínima. Lo que sí se incide es en la idea de reciclar el envase, de volver con él; así, sólo se usa uno en mucho tiempo.

¿Sus ingredientes son similares a los del producto de supermercado?

No; son sostenibles, son ecológicos. Están hechos con una proporción de ingredientes naturales, no tienen sulfatos, ni siliconas, ni ningún componente tóxico y son biodegradables.

¿Una composición más indicada para pieles sensibles? 

Es que, de hecho, tenemos hasta un producto que es específicamente para piel sensible. Igual que tengo jabones para piel atópica, también tengo un detergente para personas con piel sensible. 

Y los jabones corporales, ¿qué ingredientes tienen?

Un jabón de este estilo está hecho con aceite de oliva, aceite de coco y aceites esenciales. Sí que tiene la composición necesaria para hacer espuma, pero siempre derivada de productos naturales, de plantas. Por ejemplo, el de cítricos está compuesto de esencial de limón, cáscara de limón, aceite de oliva y aceite de coco. 

Algunos de los jabones corporales sólidos que se pueden encontrar en La Jabonería de Matia Ruben Plaza

En cuanto a precios, ¿hay mucha diferencia respecto a los productos comerciales? 

No; nosotros creemos, y el público creo que así lo entiende, que el precio es bastante razonable. Sí que, a lo mejor, puedes considerar que es un poco más caro en principio, pero luego el uso es muy largo; duran mucho. Con los champús, pasa lo mismo: duran entre 60 y 90 lavados. Ves una pastilla pequeña y dices esto no va a durar; dura un montón. Considerando la calidad, la composición y lo que duran, el precio creo que es ajustado. 

¿Qué productos son los que más éxito tienen entre la clientela? 

Los jabones los vendo muy bien, pero los champús, una vez que la gente los ha descubierto… Ha sido boca oreja. La gente que usa el champú, generalmente, repite. Lo que mejor vendo, con más facilidad o que más convencida tiene a la gente, son los champús. 

Los champús sólidos son el producto que más éxito tiene entre la clientela de La Jabonería de Matia Ruben Plaza

¿Qué tipo de clientela tienen?

Mayoritariamente mujeres; hay señores que también vienen, pero son pocos. Y luego, el rango de edad es muy curioso, pero es muy amplio: desde chicas jovencitas que están interesadas en la cosmética natural, en cuidarse; hasta señoras que están muy concienciados con el tema del medio ambiente y no quieren estar usando diferentes botes, si no que quieren reciclar. El abanico de edad es muy amplio.

¿Es gente del barrio o vienen también de otros lugares?

Tengo clientas muy del barrio, pero luego he tenido desde turistas que pasan, les parece graciosa la tienda y entran, hasta gente que está de vacaciones, se vuelven a sus provincias y me llaman porque quieren que les mande jabón. Mayoritariamente del barrio, pero sí que es verdad que hay cierto movimiento de personas ajenas al barrio. No vendemos online; es una de esas cosas que estamos desarrollando. He empezado a vender personalmente; es decir, me llama una señora: vivo en León; pues se lo mando. Hay personas que han estado de vacaciones aquí, se llevaron y se les ha acabado y me llaman, que quieren más. Por ejemplo, una señora que vive en California y me llama porque estuvo de vacaciones, se llevó y quiere comprar otra vez. Si la cosa es factible, yo se lo envío. Supongo que en algún momento lo estructuraremos; hoy por hoy, es a petición, a demanda.

¿Está la gente lo suficientemente concienciada con la sostenibilidad? 

Yo creo que cada vez más; hay palabras y significados que se nos van quedando y nos lo tomamos más en serio. Ésta es una ciudad que está medianamente concienciada. Del todo, no; todavía hay gente a la que el producto sólido le resulta raro. Pero sí que creo que es la línea a seguir y que vamos en ella. No estamos del todo concienciados al 100%, pero poco a poco. Las nuevas generaciones están bastante concienciadas con el reciclaje, con reutilizar. Por ejemplo, es una tontería, pero el mobiliario de la tienda en un 70% es reciclado: son muebles o de segunda mano o de la calle, restaurados.

¿Tienen pensado incorporar algún producto próximamente?

Queremos seguir la misma línea. Yo estoy abierta a nuevos productos siempre. Sí es verdad que tampoco me quiero ir a un rango muy alto de precio; quiero mantenerme en una media que creo que es la razonable. Sí que me ofrecen productos de cosmética sólida más caros, pero bueno, todo se verá.