Se acerca la Semana Grande donostiarra y son muchos los detalles que se tienen que perfilar, siendo uno de los pilares fundamentales establecer un operativo de seguridad que dé respuesta a las necesidades de una ciudad en fiestas.

La reunión de coordinación entre Guardia Municipal y Ertzaintza que tuvo lugar el tres de agosto en el Ayuntamiento, sirvió para escribir el guión de la estrategia a aplicar en materia de seguridad en la Aste Nagusia.

Martín Ibabe, concejal del área de Seguridad Ciudadana, explicó que este encuentro viene realizándose en la antesala de la celebración de las fiestas para “optimizar los recursos” de ambos cuerpos policiales, “detectar las necesidades que se puedan tener y establecer cómo coordinar el operativo”.

Las plantillas se refuerzan respecto a la estructura habitual “porque la situación así lo requiere” y porque “las necesidades de seguridad se incrementan”.

Este año el encuentro se recupera tras dos años sin fiestas por motivo de la pandemia. Hay ganas de reencontrarse con la calle, de sumergirse en las fiestas y había algunos detalles que cerrar pese a que “todo estaba ya muy avanzado”.

Porque nadie puede bajar la guardia en este aspecto, más si se considera que van surgiendo necesidades nuevas, como la que obliga a extremar el celo ante las denuncias de “pinchazos” a mujeres en las citas festivas previas celebradas en el entorno.

Coordinación

Ibabe insistió en la importancia que tiene la “coordinación y comunicación” entre Guardia Municipal y Ertzaintza para “ser eficaces”.

El número de agentes que saldrán a las calles, en patrullas o de paisano, también se incrementa, aunque Ibabe no quiere hablar de números. “Cada evento requiere su planificación en materia de seguridad según la previsión de afluencia existente”, puntualizó el edil donostiarra.

Los recursos de refuerzo tanto en Guardia Municipal como en la Ertzaintza se aplican en función de las necesidades. No hay que olvidar que las plantillas ya se refuerzan para verano y este incremento se vuelca en las fiestas”, incidió.

Fuera de Semana Grande estos efectivos, añadió, centran sus esfuerzos principalmente en aquellos lugares con mayor afluencia de público, como las playas.

La Ertzaintza, señaló, moviliza por su parte refuerzos a los distintos municipios que se hallen inmersos en la celebración de sus fiestas, a Donostia en Semana Grande.

Es verano y la ciudad, ya antes de la Aste Nagusia, muestra un aspecto abarrotado. Por ello “la estructura de la Guardia Municipal se refuerza” de forma previa a las fiestas. En concreto, este verano el refuerzo ha sido de 55 agentes. “En función de las necesidades que se detecten irán a un lugar o a otro”, especificó.

Esta es la temporada estival del reencuentro con las citas festivas y la que, reconocía Ibabe, también será la del aumento de los actos delictivos que habían descendido como consecuencia de la pandemia y las restricciones derivadas de la misma. 

“Si aumenta la actividad, aumenta en todos los sentidos, también en la comisión de delitos. No es difícil aventurar que este verano se saldará con peores números en este sentido que los dos previos, porque ya lo estamos detectando”, insistió Ibabe.

Los pinchazos a las mujeres están generando una importante alarma social aunque, recordaba Ibabe, “históricamente se han dado situaciones similares, como cuando se tuvo que vigilar el uso de la burundanga o se habló de inyecciones en las botellas de agua”.

Pero, reconocía, es un tema que preocupa y que se aborda “como cualquier otra cuestión que afecta a la libertad de las personas, en este caso enfocada en mujeres y jóvenes”.

Desde el punto de vista de la intervención policial, añadió, “se procederá con toda la labor preventiva que se requiere” y enviando “recursos a los recintos festivos”, tanto uniformados, que desarrollan una labor más disuasoria, como de paisano, para “ver si detectan algo más sobre el terreno”.

Ibabe, que había recogido el parecer de la Ertzaintza a tal respecto, apuntó que “no hay una línea de investigación clara” en torno a estos hechos. “Ni Osakidetza en los análisis ha hallado rastros, pero nos tomamos este tema con total seriedad, aunque se trabaje sobre todas las hipótesis”.

La colaboración del Ayuntamiento con Donostiako Piratak, que ha hecho posible la colocación de un Punto Morado en el Boulevard para dar respuesta a las posibles agresiones sexistas que se den en fiestas, fue valorada de forma positiva por Ibabe. “Toda colaboración es positiva, porque en este tema tenemos que remar todos en la misma dirección”, abundó.

Pero, quiso puntualizar, “una cosa es la colaboración y otra la potestad de enjuiciar, que la tienen los jueces”. “Las vías de canalización de las actuaciones tienen que ser las que están establecidas jurídicamente, a través de la policía y desarrollando las diligencias oportunas para llevar a quien haya que llevar ante los jueces”.

Hay que saber diferenciar colaboración y capacidad de decisión de culpabilidad. Son cuestiones muy importantes en las que no existe margen de error”, insistió.

Respuesta

En la estructura de la Guardia Municipal a la hora de atender a las víctimas de agresiones sexistas reconoció que hay “agentes con más formación que otros”. “Una de las cuestiones en las que se ha venido trabajando los últimos años es en la formación de los agentes”, insistió.

"Los refuerzos de agentes para verano se moverán de un lado al otro en función de las necesidades"

Martín Ibabe - Concejal de Seguridad Ciudadana

Y es que en la actualidad “los agentes que llegan de Arkaute reciben un periodo de formación de siete meses, más dilatado que antes, lo que significa que reciben más formación en distintas materias, siendo esta una de las más importantes para la sociedad”, destacó. “La formación nunca es suficiente y hay que actualizarla”, reflexionó.

En lo que se refiere a prevención e intervención ante la posible comisión de delitos sexuales en Semana Grande el operativo de la Guardia Municipal, apuntó, pasa por trabajar “en los retornos seguros a casa”, un protocolo que, informó, ya ha dado sus frutos en forma de detenciones. “Es una forma muy eficaz para impedir que ocurran estos delitos y, en caso de que ocurran (algo que ya ha pasado) se pueda reaccionar con rapidez y detener al autor del delito”, explicó el edil de Seguridad Ciudadana.

¿Cómo se estructura este operativo? “Cuando se acaban los eventos en algunos ejes se incrementa la presencia policial para tener más vigilancia sobre esas vías que llegan a los barrios”, destacó Ibabe.

“Ha ocurrido y ocurre que nos hayan llamado porque alguien ha observado algún movimiento raro y tener activado este recurso permite estar encima de inmediato”, informó.

“Esta es una labor compartida entre Guardia Municipal y Ertzaintza, que se sectorizan la ciudad para operativamente poder cubrir más zona”, insistió.

A la luz del día

Recientemente las imágenes de un joven intentando cometer un robo a plena luz del día en la rampa que conecta la plaza Teresa de Calcuta y el paseo de Francia provocaron un encendido cambio de impresione en las redes sociales.

En esta zona, el barrio de Egia, “está en permanente vigilancia”. “La policía ha trabajado más en esta zona en los últimos meses porque, efectivamente, se han dado más actos delictivos de similares características”, destaco Ibabe, que reconoció que en algunos casos en los que se procedió a la detención de la persona que había cometido el delito tras pasar esta a disposición judicial volvía a estar en libertad en pocas horas.

En este entorno en el que funciona la estación de autobuses y la de trenes, “hay una parte de vigilancia que se ve y otra que no se ve”, la que desarrollan los policías de paisano.

"Una forma eficaz de actuar es trabajar en los retornos seguros a casa"

Martín Ibabe - Concejal de Seguridad Ciudadana

“En este punto, como en otras ciudades junto a las estaciones, hay una vigilancia especial. Además a nivel internacional existe un protocolo que tiene que ver con los niveles de alerta que exige incrementar esa presencia”, manifestó el edil del PNV.

Ante la cercanía de las fiestas, Ibabe quiso insistir en una idea. “La seguridad es un servicio. A la Guardia Municipal le toca vigilar y actuar, pero la colaboración ciudadana es importante. Si se ve algo es fundamental llamar para que podamos actuar. Esta colaboración es básica”, destacó.

Más allá de aspectos vinculados con la comisión de delitos y la colaboración en este sentido, Ibabe abogó por “el cumplimiento de las ordenanzas municipales”, como la del ruido.

“Las fiestas son para que las disfrutemos todas y todos. Y para ello hay que aplicar la premisa de ejercer la libertad hasta el punto de no incidir la libertad de otra persona”, aconsejó.

La Semana Grande, y el concejal de Seguridad Ciudadana es muy consciente de ello, será “una semana muy intensa” que confía que discurra con la mayor tranquilidad posible, un objetivo para cuya consecución la colaboración de la ciudadanía resulta de vital importancia. “Tenemos que conseguir entre todas y todos que nuestras fiestas sean agradables”, concluyó.