Duración: 47:48 minutos de juego.

Saques: 4 de Bengoetxea VI (tantos 3, 15, 20 y 22) y 1 de Irribarria (tanto 11).

Faltas de saque: Ninguna.

Pasas del Cuatro y Medio: Ninguna.

Pelotazos: 209 pelotazos a buena.

Tantos en juego: 12 de Bengoetxea VI y 10 de Irribarria.

Errores: 5 de Bengoetxea VI y 6 de Irribarria.

Marcador: 0-1, 1-4, 3-5, 4-5, 4-6, 5-9, 5-10, 6-11, 10-12, 11-12, 15-13, 16-13, 16-14, 17-15, 18-15, 20-16, 21-16, 22-16.

Botilleros: Jokin Etxaniz ejerció de botillero de Irribarria y Bengoetxea optó por jugar sin botillero.

Incidencias: Partido de octavos del Campeonato del Cuatro y Medio de Primera disputado en el frontón Astelena de Eibar. Encuentro a puerta cerrada. En el primer partido, Jaka-Imaz ganaron a Altuna III-Aranguren (22-5).

- Oinatz Bengoetxea tejió poco a poco su trampa. Elaboró un laberinto dentro de la jaula y creó un escenario idílico para aprovechar sus virtudes. Redujo el acotado lo máximo posible y limitó las armas de Iker Irribarria, que tuvo que luchar por adaptarse en una distancia donde no termina de sentirse cómodo, sin poder encontrar la llave con la que sacar provecho de su poderoso golpe. El leitzarra supo aguantar en los primeros tantos, cuando el partido se movió al ritmo que quiso Irribarria, pero con el paso de los minutos, la zona de acción empezó a estar cerca del frontis y ahí Bengoetxea fue muy superior. Efectos, remates inverosímiles, dominio de los ángulos€ el delantero navarro, experto en desenvolverse en los cuadros alegres, impidió que Irribarria gozara en la segunda parte del encuentro y eso le valió para darle la vuelta al marcador y vencer, finalmente, por 22-16. En la siguiente ronda, Oinatz se verá las caras con Mikel Urrutikoetxea.

El Cuatro y Medio es una de las asignaturas pendientes de Irribarria. No termina de encontrar su mejor juego en el acotado. Ayer, pese a la derrota, el aramarra dio un paso adelante. Supo plantar cara a un buen Bengoetxea, que ralló a gran nivel en la segunda parte del encuentro, y solo pequeños detalles le impidieron llegar a un final frenético. Esa mejoría fue evidente en la primera parte del duelo. El guipuzcoano supo alargar los tantos y dominó en el peloteo. Metió mucho ritmo a la pelota y eso le permitió tener buenas oportunidades de remate. Con la mitad del trabajo hecho para Irribarria, el marcador dibujó un 5-11 favorable al aramarra. Sin embargo, en las piernas de Bengoetxea hay muchas batallas. El leitzarra no se desanimó y esperó a su oportunidad. Maduró los tantos y fue capaz de llevar el partido a los primeros cuadros, a su terreno. Ahí, Irribarria sucumbió ante todo un especialista y Oinatz no falló a la hora de cerrar el choque.