donostia - El técnico guipuzcoano tiene ya una importante trayectoria como entrenador ayudante, aunque también ha sido primero en Iraurgi. En principio, iba a seguir allí, pero una llamada en verano del Bilbao Basket le hizo cambiar de planes. Es habitual verle en el Gasca siguiendo al Delteco Gipuzkoa Basket y el próximo lunes no se perderá el día de San Sebastián: "Jugamos el 19 contra el Manresa y ya he pedido libre el 20, así que estaré ahí con el barril". Está encantado en el Bilbao Basket, recién ascendido y que se ha convertido en la gran revelación del curso en la ACB.

Vaya éxito.

-Sí, nadie se esperaba esto. Si nos dicen en verano que íbamos a jugar la Copa... Cuando llegué yo, el equipo acababa de subir de la LEB Oro y el objetivo era mantenerse, que lo sigue siendo, pero llevamos ya diez victorias. Yo nunca había hecho una primera vuelta así, ni en los mejores años del GBC. Estamos muy contentos, da gusto trabajar con el grupo y está más cerca el primer objetivo del club, que sigue siendo continuar en la ACB.

Encima se metieron ganando en el Palau. Casi nada.

-Sí, además en un partido que tuvo de todo contra el Barça, que había metido mucho dinero en verano para cambiar un poco esa dinámica contra el Real Madrid. Es verdad que dependíamos de nosotros para entrar en la Copa, pero creo que poca gente pensaría que podíamos dar la sorpresa ahí. Este equipo tiene una cosa y es que cree en todo lo que hace.

Han ganado a todos los equipos de Euroliga en la primera vuelta.

-Sí. Me han dicho que solo lo habían hecho antes el Madrid y el Valencia en una vuelta liguera. Imagínate la gente cómo está aquí. Tres han sido en Miribilla (contra Valencia, Real Madrid y Baskonia) y el del Palau. Es algo muy difícil lo que hemos hecho.

A priori tenían un equipo para mantenerse, con gente que venía de la LEB Oro y algunas apuestas entre los fichajes.

-Aquí hay seis chicos que el año pasado estaban jugando en la LEB, cinco de ellos en Bilbao. Vienen de competir en esos campos duros de la LEB. Luego están las apuestas de los dos franceses (Rousselle y Bouteille) y del lituano Kulboka, más la experiencia de Rafa Martínez, Ondrej Balvin y Sulejmanovic. Mucha gente en verano comentaba: ¿Dónde van estos de Bilbao? Algunos me llamaban y me decían: ¿Qué? ¿Otro año para ti de pelear abajo, ¿no? Pero luego se ha dado todo bien, el grupo es muy bueno para trabajar y los jugadores han conectado bien entre ellos. Álex Mumbrú repartió muy pronto los roles de cada uno y definió el estilo de juego. Quizás Iván Cruz y Tomeu Rigo son los que menos están jugando, pero todos tienen su oportunidad. Álex es de rotar mucho en los partidos y tiene a la gente muy metida.

Será difícil repetir en la segunda vuelta.

-Sí. Lo bueno es que ya tenemos diez victorias. Aquí hay muchos jugadores de muy poco dinero, un poco como el GBC el año pasado. Bilbao, tras el descenso, no gasta un duro más y ha cambiado su mentalidad. A ver si seguimos así de bien, esto es incluso demasiado.

Forma el cuerpo técnico junto a Álex Mumbrú y Javi Salgado.

-A Álex no le conocía nada, solo de jugar contra él. De jugador era un competidor nato, muy competitivo, un peleas, era duro jugar contra él. Cuando me llamó pensé que me iba a preguntar por algún jugador o así, pero me dijo que me quería en el equipo. También me llamó Javi y me dijo que fuera para allá. Con ellos estoy muy a gusto; Álex marca mucho el trabajo. Ellos ven cosas que yo no veo; esa mezcla es buena porque yo les puedo aportar otras cosas. Al vestuario lo manejan de lujo, a la hora de gestionar el grupo se nota que tienen otra visión que igual yo no tengo. Álex es un tío muy organizado, trabajador, competitivo también como entrenador y con ganas de tirar para adelante.

La nómina de entrenadores con los que ha trabajado es espectacular y varios de ellos coincidirán en la Copa con usted. El técnico de moda es Porfi Fisac.

-Una de las cosas que ha acertado Zaragoza es que la plantilla es del estilo Porfi. Son unos guerreros, muy involucrados con él y que van a muerte con su idea. Lo está haciendo muy bien en Zaragoza.

Jaume Ponsarnau ha tenido momentos difíciles con el Valencia, pero el año pasado ganó la Eurocup y este año lo tiene con opciones a todo.

-Lleva dos años que parece que no arranca a principio de temporada, y el año pasado ganó la Eurocup y este año está a un partido del play-off de Euroliga y el equipo en la Copa. Los equipos de Jaume siempre van mejorando si le dejas trabajar. Es muy bueno. Me alegro por él. Después de nuestro partido, estuve siguiendo el suyo para ver si entraba también en la Copa. Valencia es una plaza difícil para un entrenador.

Se va a medir a Pablo Laso en los cuartos de final de la Copa.

-La mala suerte es que va a caer a la primera. Ya ves, se me va pegando lo de Bilbao (se ríe). Lo que está haciendo es histórico, no solo en Madrid, es que ha cambiado el estilo del basket. A ver si podemos competir con ellos; no es el rival que más me apetecía, pero ya que estamos ahí da igual. Ya le hemos ganado una vez en la liga y la gente quiere más. Aquí en Bilbao es doble o nada, son la bomba.

Hablemos de sus exequipos. Dejó el listón alto en el Iraurgi, pero Iñaki Jiménez también está haciendo una gran temporada y ha ganado la Copa LEB Plata.

-Lo dejo y van para arriba. Ya les dije: Ahora tenéis un entrenador bueno. Me alegro porque hay mucha gente que repite del año pasado y en verano hablé yo con muchos y me jodió tener que dejarlo. Iñaki se lo merece porque lleva varios años en la EBA. Lo está haciendo muy bien y el grupo de gente es cojonudo.

Ha solido ir al Gasca precisamente con Iñaki. ¿Qué impresión tiene del Delteco GB?

-Lo veo muy bien. No están fallando en casa, que es muy importante. Quitando Valladolid, que por plantilla es un mérito tremendo lo que está haciendo, el GBC en casa es, de los equipos a priori favoritos, el más fiable. Está compitiendo muy bien y en defensa es de los mejores. Ahora tiene partidos complicados, fuera en Coruña y Palma... vamos a ver, pero si sigue sacando lo de casa estará ahí porque hay equipos que han perdido algún partido inesperado en casa. Además, en el Gasca cuando he ido ha habido un buen ambiente.

El Valladolid de Hugo López, con el que también ha estado de segundo, parece su gran rival por el primer puesto.

-Con Hugo estuve en Angola. Lo está haciendo increíble y ojalá siga, pero es que la plantilla está rindiendo incluso por encima de sus posibilidades, un poco como nosotros en Bilbao, y puede llegar el momento de perder un par de partidos o tres. Palma, Breogán, GBC o incluso Palencia, a priori por la plantilla que tienen, están por encima. Pero juegan muy bien, a un ritmo tremendo.