- Las once grandes ligas europeas han consensuado un manifiesto para expresar su total rechazo a la intención de la FIFA de disputar el mundial de fútbol cada dos años, argumentando que así se lo han solicitado 146 de las 211 federaciones que integran la asociación. Al frente del laboratorio de ideas que ha montado el presidente de la FIFA Gianni Infantino se encuentra Arsène Wenger, un extécnico francés de 71 años, economista y encargado de lanzar una serie de propuestas que ha soliviantado al fútbol europeo. Desde las FIFA y de la otra parte, las ligas europeas y hasta la propia UEFA, que también está en contra de este proyecto, se persigue lo mejor para el futbolista, y bajo esta premisa el exentrenador del Arsenal lanzó ayer la última consideración: como se jugará el Mundial cada dos años, todos los partidos de la fase de clasificación se concentrarán en el mes de octubre. Es decir, una especias de mundial paralelo y añadido.

"No queremos aumentar el número de partidos, queremos garantizar el descanso de los jugadores, que haya menos viajes, más partidos importantes , además de reducir la brecha entre los países que tienen más oportunidades y los que menos", dijo Wenger tras el encuentro que, durante dos días, han celebrado en Doha exfutbolistas y técnicos que forman parte de la asesoría de la FIFA.

Entre los eminentes exfutbolistas que debaten en Doha, convertida en virtud del próximo Mundial en la meca artificial del fútbol, están los exmadridistas Roberto Carlos o Ronaldo Nazario, máximo accionista del Real Valladolid. "Hay muchos beneficios para este nuevo calendario. Tener la competición más importante del mundo cada dos años sería espectacular", dijo Ronaldo, quien considera que "es una oportunidad increíble para los futbolistas y aficionados. Cuatro años son demasiado tiempo. Con esta medida muchos países van a tener muchas más posibilidades de jugar un Mundial", destaca.

La cosa va tan en serio que la FIFA quiere poner en marcha la idea a partir de la Copa del Mundo que en 2026 se disputará en México, EEUU y Canadá. De tal modo que en 2027 se agruparán todos los torneos de confederaciones el mismo mes y dos años después, en 2028, se disputaría el siguiente Mundial. "El calendario está anticuado. Hay que organizarlo de forma que sea eficiente, agrupando las ventanas internacionales, en lugar de diferentes parones, que no son prácticos. Reagrupar y jugar menos partidos clasificatorios", justifica Wenger.

La propuesta de la FIFA lleva camino de provocar un auténtico cisma en el fútbol, y eso lo adviertieron las grandes ligas europeas, como la Premier, LaLiga, Serie A, Bundesliga o Ligue 1, firmando un documento contundente y unánime en contra esta intención FIFA porque atenta directamente contra sus intereses. Alegan que eso implica rebajar el valor de las competiciones locales y también los torneos continentales, además de los enormes problemas de calendario que una medida así traería para los clubes.

Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, está en clara sintonía. A nadie se le escapa que el valor (y el dinero que genera) de la Champions bajaría muchos enteros con un Mundial cada dos años. "Podríamos decidir no jugar", amenazó Ceferin en The Times. "Hasta donde yo sé, los sudamericanos (Conmebol) están en la misma página. Así que buena suerte con un Mundial como ese (...) Creo que nunca se dará porque va en contra de los principios básicos del fútbol".

"No vamos a echar leña al fuego". El presidente del COI, Thomas Bach, eludió pronunciarse sobre cómo se verían afectados los Juegos Olímpicos por la celebración del Mundial de fútbol cada dos años, aunque afirmó que las consecuencias "son cada vez más claras" y confió en la capacidad de mediación de "las asociaciones continentales". "No vamos a echar leña al fuego", dijo el dirigente alemán, preguntado al respecto tras una reunión de la Comisión Ejecutiva del COI. "No vamos a interferir en esa discusión", insistió. "Hay muchas voces procedentes de distintas direcciones". "Pero el efecto es muy claro. Lo han hecho notar distintos participantes en los debates", comentó Bach.