Real Madrid Courtois; Lucas Vázquez, Militao, Nacho, Mendy; Casemiro, Kroos, Modric; Marco Asensio, Vinicius, Benzema.

Barcelona Ter Stegen; Mingueza, Araujo o Piqué, Lenglet; Dest, Busquets, Pedri, De Jong, Alba; Messi, Dembélé.

ÁrbitroGil Manzano (Comité Extremeño).

EstadioAlfredo Di Stéfano.

Hora/tv21.00/'Movistar'.

- El gran clásico de Primera dejará en la noche de hoy un nuevo líder en la clasificación y una buena dosis de presión para el Atlético de Madrid, tras la cita entre un Real Madrid crecido por la imagen ofrecida ante el Liverpool y un Barcelona con el factor físico de su lado, que vuela en el torneo doméstico.

Al final de la primera vuelta era complicado explicar que del clásico de abril saldría un nuevo líder. Nadie en el Real Madrid y Barcelona lo podían imaginar por la distancia de un Atlético de Madrid crecido. El desplome del equipo de Diego Simeone y el regreso a la regularidad de dos grandes que siempre vuelven presentan un partido con todos los alicientes en un nuevo escenario.

Son dos rachas enfrentadas: 12 partidos sin perder del equipo de Zidane, recuperando pegada con 30 goles a favor y seguridad con tan solo siete en contra; y una remontada espectacular de los de Ronald Koeman, con 13 victorias en las 14 últimas jornadas, con 9 triunfos consecutivos lejos del Camp Nou.

Al duelo llega el Real Madrid lanzado en lo anímico tras la imagen mostrada en una Liga de Campeones en la que es el único representante del fútbol español. El 3-1 al Liverpool, la unión para superar las bajas defensivas de Sergio Ramos, Dani Carvajal y Raphael Varane, el partido soñado del brasileño Vinicius y los goles de Marco Asensio en sus cuatro últimos encuentros son motivos que lanzan el optimismo antes de un clásico en el que la principal preocupación es la diferencia en el desgaste físico ante un rival que no tuvo partido entre semana.

Es un factor que provoca que Zidane medite introducir novedades o mantener lo que tan bien funcionó en la Champions. La imagen imponente de Militao, el poderío del centro del campo con tres pilares intocables, la línea goleadora de Benzema con goles en las seis últimas jornadas de Liga y el reto de volver a marcar en un clásico casi cuatro años después. Los cambios pasarían por el regreso a un sistema con tres centrales. Provocaría el paso de Mendy al centro de la zaga y la entrada de Marcelo en el carril izquierdo.

Para ello, tendría que salir del once Vinicius, poco probable tras el liderazgo mostrado ante el Liverpool y el paso al frente en la definición con su doblete, o Asensio en racha goleadora. Hazard sigue fuera mejorando su físico y Valverde, clave en el triunfo del Camp Nou en la primera vuelta (1-3), también cuenta con opciones si Zidane decide meter músculo y renovar energía en la medular.

El Barcelona aterriza en Madrid con el objetivo firme de dar el salto al liderato. Y eso que no hace tanto era un equipo a la deriva. La situación institucional, sin presidente desde octubre y con una crisis económica galopante, tenía un reflejo en la situación del equipo, que no acaba de levantar el vuelo. De hecho, llegó a estar 12 puntos por debajo del Atlético a principios de diciembre tras su derrota en Cádiz.

Pero poco a poco, Koeman dio con la tecla. Con tres centrales y dos carrileros, su equipo fue creciendo. Apareció Dembélé, Messi seguía a lo suyo, De Jong fue un jugador diferencial e incluso Busquets era otro. El Barça, desde aquel partido en Cádiz, no ha vuelto a perder y en los últimos 19 ha logrado 51 puntos sobre 57 posibles; el Atlético, solo 40.

"Habrá una exigencia máxima, pero estamos preparados. Ha habido días para recuperar"

Entrenador del Real Madrid

"En este partido necesitamos al mejor Messi, pero también al mejor Barça"

Entrenador del Barcelona