DONOSTIA - Los brotes de COVID-19 detectados en Gipuzkoa, el último de ellos aún activo con foco en la localidad de Ordizia, han obligado a suspender por primera vez en sus 28 años de historia la Donosti Cup, uno de los torneos de fútbol base más importantes del mundo que tiene lugar cada mes de julio en Donostia.

La pandemia había obligado ya a redimensionar la competición prevista para este año, sin la participación de clubes extranjeros, y más centrada en los equipos locales, una decisión que se adoptó hace dos semanas cuando, según ha explicado a EFE su director, Iñigo Olaizola, "la situación sanitaria parecía más estable y controlada".

Un contexto que animó a la organización a celebrar "una versión más reducida" que sin embargo ha sido descartado definitivamente este jueves al constatar que "en los últimos días" la situación sanitaria se ha vuelto "más inestable".

"Se habían inscrito equipos de un montón de pueblos de Gipuzkoa, incluidos Ordizia y su comarca, y desde el principio cuando convocamos el torneo ya dijimos que para nosotros es una prioridad poder garantizar en todo momento la salud y la seguridad de los participantes, algo que ahora mismo no creemos que podamos hacerlo" ha explicado Olaizola.

"Tenemos miedo de que haya cualquier brote. Tenemos equipos de muchos puntos de Gipuzkoa y, aunque nos da muchísima pena, nos parece que es la decisión más prudente y coherente en estos momentos", ha subrayado.

Olaizola ha lamentado esta suspensión, la primera tras 28 "ininterrumpidas". "Nunca piensas que va a llegar este momento, pero tenemos que mirar al futuro. La situación no nos daba garantías y al final ante el riesgo de que haya un posible brote y que nosotros sigamos promoviendo el torneo, me parece que lo más prudente es cancelar y no seguir este año adelante con él".

El director de la Donosti Cup se ha mostrado dispuesto a volver el año que viene "con más fuerza", aunque no ha ocultado que la organización sigue "preocupada por la evolución" de la pandemia en el contexto internacional porque los países extranjeros "son fundamentales" para este torneo, que antes de su cancelación tenía inscritos más de 90 equipos procedentes sólo de los Estados Unidos.

Por este motivo, Olaizola ha precisado que para 2021 habrá que mantener la "ilusión" pero al mismo tiempo estar "pendientes" de "como avance todo", con "la lógica prudencia".