- Xabier Zaldua volvió a proclamarse vencedor del Campeonato de Pentatlón Vasco. Y ya van tres años seguidos. El aizkolari de Zumarraga emergió como el ganador de una final pasada por agua, y ni la lluvia que incomodó el trabajo de los participantes ni los nuevos finalistas de una modalidad que tiene más practicantes cada año lograron hundir al tricampeón. Insumergible, Zaldua logró remontar primero la ventaja inicial de Kepa Peñagarikano, que se estrenaba en un torneo individual, y luego, una vez por delante, resistió la presión de Julen Gabirondo, que nunca antes había participado en una competición de esta disciplina y que fue la principal amenaza para el vencedor. Finalmente, el campeón aventajó en tan solo 35 segundos al urnietarra, y mejoró en 1:45 el tiempo de Arria V, que fue tercero al igual que el pasado año, y en más de dos minutos y medio el del azpeitiarra.
La intensa lluvia condicionó la final disputada el sábado en la plaza de toros de Azpeitia. Y es que la humedad dificultó el trabajo de los participantes, sobre todo a la hora de agarrar la piedra y las pesas, y la prueba final, la carrera a pie por el perímetro del coso, se hizo por una superficie encharcada o embarrada. Poco antes del comienzo de la prueba, a las diez de la noche, la organización todavía se estaba planteando si aplazar o no la competición, pero finalmente decidió disputarla y, pese a la incomodidad para el público y los deportistas, se dio paso a una edición espectacular.
Los competidores tuvieron que realizar 25 alzadas con una piedra esférica de 100 kilos, recorrer dos plazas arrastrando una mole de 400 kilos, cortar tres troncos de 1,25 metros de perímetro, transportar dos pesas de 50 kilos seis plazas y recorrer a pie tres kilómetros por el borde del coso.
Kepa Peñagarikano fue el gran dominador de la primera tanda. Al igual que sus rivales en este turno, Iñaki Errazkin y Julen Kañamares, el azpeitiarra había competido en el campeonato de pentatlón vasco por parejas, pero nunca había disputado una final individual. El expelotari marcó el mejor tiempo de la final en la prueba de harri jasotzea, concluyendo en tan solo tres minutos y 48 segundos, y también fue el primero de los seis finalistas al término de la giza proba, con un registro de 8:51. Peñagarikano, sin embargo, terminó exhausto las cuatro primeras pruebas. Sin fuerzas, el azpeitiarra se tomó un tiempo para recuperar la energía y solo pudo ir andando durante los primeros compases de la carrera a pie, y ahí se disiparon sus opciones de triunfo.
La segunda tanda reunió a los tres primeros clasificados. Zaldua, el más rápido de su turno, necesitó quince segundos más que Peñagarikano para terminar la prueba para harrijasotzailes, y Gabirondo empleó un minuto y seis segundos más. A Arria V, a su vez, se le atragantó la prueba y empleó casi dos minutos más. La ventaja virtual de Peñagarikano aumentó en el arrastre de piedra. Zaldua acabó un minuto y medio después del azpeitiarra; Gabirondo, a 2:24; y Arria V, a 2:55.
El trabajo con la aizkora, al igual que la carrera a pie, suele ser clave en el pentatlón, y ayer volvió a ser decisivo. Zaldua, aizkolari nato, remontó la ventaja de Peñagarikano y mejoró en 23 segundos el tiempo del azpeitiarra. Arria, otro especialista, acabó a 55 segundos del zumarragarra; y Gabirondo, a poco más de minuto y medio.
El vencedor se mantuvo por delante tras la prueba de pesas, con 35 segundos de ventaja sobre Peñagarikano (22:01). En la plaza, además, Gabirondo recortó distancias con Arria, y terminó tan solo tres segundos por detrás del errezildarra. Ambos comenzaron la carrera a pie casi a la par, con cerca de un minuto de desventaja con respecto a Zaldua. Ahí inició Gabirondo su persecución a Zaldua. Buen corredor, el segalari urnietarra presionó al zumarragarra y acabó logrando el mejor tiempo parcial en esta prueba. Al término de la competición, el debutante reconoció que tenía esperanzas de lograr la victoria. Su ritmo, sin embargo, no fue lo suficientemente alto como para inquietar al campeón. Zaldua dosificó su ventaja e incluso se permitió acelerar en algunos momentos, y completó las 30 vueltas cuando a Gabirondo aún le quedaba más de una.
Tras proclamarse vencedor, el zumarragarra mostró tres dedos de su mano para recordar que esta era la tercera vez que conseguía imponerse en la prueba reina de los herri kirolak.
CLASIFICACIÓN GENERAL
