- El remo vasco vivió ayer una jornada llena de ilusión. Con el inicio de la fase tres de la desescalada llegó por fin la autorización para que los remeros puedan retomar los entrenamientos conjuntos. Por primera vez desde la declaración del estado de alarma, el pasado marzo, las traineras pudieron volver a surcar las aguas, y los equipos iniciaron una puesta a punto exprés para comenzar la temporada el mes que viene. Una vuelta al trabajo adaptada a los nuevos tiempos, con un protocolo de seguridad para evitar los contagios por coronavirus que se hizo visible en las mascarillas que llevaban remeros, técnicos y entrenadores en sus embarcaciones. Si nada se tuerce, las ligas Eusko Label y EuskoTren comenzarán en Coruña el 4 de julio, y una semana después arrancarán en Pasaia las regatas de la ARC-1, la ARC-2 y la ETE.
Entre los clubes que retomaron ayer su actividad, estuvieron los equipos masculinos y femeninos de Orio y de Hondarribia -en las imágenes-.