donostia - Ola a ola, metro a metro, Kaiku marcó en la tarde de ayer un tiempo estratosférico en la jornada inicial de las Zarauzko Estropadak, con un largo final que pasará a los anales de la cita guipuzcoana. 19 minutos, 55 segundos y 92 centésimas. Un registro que le otorga una amplia renta a defender este mediodía (12.15 horas/ETB1) en la regata decisiva para dirimir al campeón. 17 segundos de venta sobre Orio; 19, sobre Orio y 23, sobre Urdaibai se prevén muchos para que sean volteados en los poco más de cinco kilómetros y medio de los que consta una cita de la Liga ACT. Máxime si uno se atiene a la igualdad predominante en esta competición, que esta temporada está ofreciendo más emoción que nunca. La afición arraunlari, entre alegrías y sufrimientos, se monta cada jornada, incluso cada largo, en una imparable montaña rusa de sensaciones; todos ellos, viajando, casi, con el ingrediente nervioso que, casi de manera ininterrumpida, percibe tenerlo en sus tripas con las subidas y bajadas. Las ciabogas y las olitas malditas o benditas, depende del momento, si se adentra en el agua.

La tanda de honor de la regata contó con cuatro historias, uno por cada largo. La primera, con Kaiku como protagonista. Nuevamente, la Bizkaitarra volvía a verse de inicio en primera línea motivando buenas sensaciones que, por otra parte, eran de esperar. Haciendo valer la regularidad mostrada por el líder y su aspirante, Hondarribia y Orio, la trainera de Sestao ya se encuentra lejos de poder optar a su cuarta corona consecutiva, lo que le otorga una relajación psicológica para los remeros, y entrenador, a la hora de preparar las regatas que se transforman después en segundos. Tres y cuatro, exactamente, sobre verdes y amarillos, en este orden, en la primera ciaboga. Por su parte, la presión de poder ver escapar, o acercarse, media Liga en Zarautz dio inicio al segundo largo de los capos.

En él, Hondarribia, el actual jefe de los botes más peligrosos del Cantábrico, dejó buenas muestras de por qué comanda la clasificación general. Las ciabogas que protagonizan Ioseba Amunarriz, patrón, y Txalo Carrión, proel, asustan de solo verlas. Perfectas, sabiendo visualizar Carrión el momento preciso para clavar el espaldín, maniobrando con rapidez el equipo, y dándole su fuerza y colocación desde popa Amunarriz para salir, de nuevo, hacia mar adentro con velocidad y lograr valiosos metros de ventaja sobre sus rivales. Enemigos deportivos que en pocos metros se convirtieron en perseguidores, puesto que la vuelta en popare de la Ama Guadalupekoa, aprovechando las olas, se resume con el vocablo espectacular, como acostumbran los verdes, pero no perfecto. La perfección llegaría después desde Sestao.

Con dos traineras de ventaja se aventuró la embarcación bidasotarra hacia la segunda pasada por la ciaboga exterior. Orio, maldiciendo cada uno de los giros, -no acaban de corregir sus entradas a ciaboga- fue de menos a más. Hecho que es de alabar, y demuestra la solvencia física y, sobre todo, psicológica con la que afronta la San Nikolas la parte final de la temporada. De brancas, los aguiluchos sacaron a relucir sus vatios para remontar y ponerse en paralelo con Hondarribia y Kaiku. Y Tirán y Urdaibai, que marcaron grandes tiempos en las anteriores tandas y luchaban de tú a tú con los tres botes con más puntos de la ACT.

Todo indicaba que volvería a ser una batalla cuerpo a cuerpo entre guipuzcoanos, como en Galicia, pero en esas previsiones apareció como un ciclón la Bizkaitarra. La embarcación entrenada por José Luis Korta recordó por momentos a la perla negra que apabullaba a diestro y siniestro, a cualquiera que se pusiera a su babor y a su estribor. Su patrón, Asier Zurinaga, engrosó ayer su palmarés invisible, el de las grandes tardes que lleva un deportista en su recuerdo, aunque no signifique bandera o título. Las mil y una olas que surcó su trainera, los 20, 24 y 29 segundos de mejora en un solo largo que cosechó en comparación a Orio, Hondarribia y Urdaibai, respectivamente, conquistar media bandera de Zarautz en 1.389 metros.

La segunda tanda, con San Juan como representante guipuzcoano, deparó una bonita lucha entre la Erreka y Tirán. Finalmente, los gallegos se llevaron el gato al agua, pero los rosas muestran poder estar arriba hoy también. Pero la noticia más celebrada ayer en Pasaia tuvo su epicentro en San Pedro, segundo en la tanda inicial, aguantándole el pulso a Urdaibai, y que finalizó octavo. Ahora, Astillero se ve más cerca, a cuatro puntos.

Jornada decisiva en arc La jornada de hoy será clave también en ARC. En el Grupo 1, Zumaia y Getaria pueden asegurarse este mediodia (12.30 horas) en Santoña su presencia en el play-off de ascenso a la ACT. Si Lekittarra falla, las dos traineras guipuzcoanas confirmarán presencia en la eliminatoria por el ascenso. En ARC-2, en cambio, Zarautz tiene pie y medio en la categoría de plata. La Enbata, aventaja en seis puntos a Deusto a falta de tres citas. La Villa de Bilbao acogerá la regata de hoy (12.15 horas).

La ACT dio a conocer ayer su veredicto sobre la apelación presentada por Orio contra la decisión del Juez de Competición sobre los hechos acontecidos en la regata de Getxo, celebrada el 26 de julio, en la que Kaiku fue primero sancionada con tres segundos por manipulación de objetos tecnológicos externos (minicámara de ETB). La decisión fue recurrida por el club sestaoarra y Hondarribia, aceptándose este recurso. Finalmente, queda sin efecto la sanción.