Mala suerte, árbitros... y algo más

cuatro partidos que se deciden en los últimos segundos y otras tantas derrotas. El Lagun Aro GBC ha caído en lo que se denominan finales a cara o cruz contra el Manresa, el Joventut y en los últimos días contra el Bilbao Basket y el Real Madrid. La mala suerte y las actuaciones arbitrales han sido dos de los argumentos utilizados por jugadores, técnicos y directivos para referirse a estas derrotas. Pero cuando hay cuatro finales de este tipo y el equipo no ha ganado en ninguna de ellas, es probable que haya algo más que mala fortuna y una actuación arbitral en contra, y lo cierto es que el equipo de Laso no ha sabido gestionar los últimos segundos en esos encuentros.

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Canastón de San Miguel tras perder once puntos de renta

El Lagun Aro GBC visitaba el Nou Congost en la octava jornada pleno de moral gracias su balance de 5-2 y a siete minutos del final del partido el sexto triunfo parecía en el bolsillo porque los de Laso tenían once puntos de ventaja (47-58). Sin embargo, el equipo no supo gestionar esta jugosa renta y el choque se convirtió en un cara o cruz. Tras un intercambio de canastas, Tsikitishvili metió un triple a falta de seis segundos. En la última acción local, San Miguel recibió en la línea de tres y, agobiado por la buena defensa del GBC, se elevó y lanzó una bomba que entró tras tocar varias veces en el aro. Una jugada afortunada para el base, que en cualquier caso demostró todo el talento que atesora. Poco que achacar a la defensa en la última acción, pero el final del partido, con esos once puntos de ventaja para el Lagun Aro, nunca debió ser tan ajustado.

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English mete una canasta y Panko falla la última opción

Dos semanas después de perder en Manresa, el Lagun Aro visitó al DKV Joventut, encajando su segunda derrota en un final a cara o cruz. Doblas había puesto el empate a 73 a 40 segundos de la conclusión. El Lagun Aro defendió bien el siguiente ataque del Joventut y Trias tiró un triple que no entró. El rebote largo fue para los locales. Lo recogió English, que anotó y luego Panko falló un tiro forzado para empatar. Nuevamente, el equipo de Laso no había sido capaz de gestionar su ventaja, de diez puntos en el minuto 25. Además, hubo quejas hacia los árbitros, que pitaron una inexistente cuarta falta a Doblas en el minuto 25, lo que hizo que el cántabro se tuviera que sentar demasiado tiempo en el banco. El gran problema, sin embargo, fue no coger ese rebote tras el fallo de Trias. Además, la estrategia en la última jugada no funcionó.

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Los polémicos seis segundos finales y el triple de Jackson

Los seis segundos finales del derbi del domingo son los más debatidos de la historia del GBC. Con tres arriba para los guipuzcoanos, el Bilbao Basket tuvo tiempo para tirar dos triples y en el segundo, Jackson empató. Los jugadores y Laso se defienden diciendo que no hubo opción de hacer falta, pero tampoco fueron capaces ni de asegurarse el rebote ni de por ir a ese balón que salió despedido y cogió Jackson. Antes Miralles había fallado dos tiros libres y luego Salgado dijo que los árbitros les habían "robado a la cara". Según Laso y los jugadores, la derrota fue por mala suerte y por los árbitros. Pero el caso es que el Bilbao Basket tiró dos triples en seis segundos.

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Otra mala defensa al final, otro triple y otra prórroga fatídica

Cuatro días después, el Lagun Aro volvió a afrontar los últimos segundos con tres puntos de ventaja, y otra vez perdió. Tras una buena defensa, Suárez falló su triple, pero el rebote largo fue a manos del rival -igual que en Badalona y Bilbao-. Llull se fue de Baron y Doblas, que de forma inexplicable no le hicieron falta, y empató. Luego Arteaga regaló un balón al Madrid y Prigioni tiró solo para ganar. Falló, pero el Madrid arrolló en la prórroga. Laso volvió a quejarse del árbitro, aunque hizo autocrítica: "Debimos hacer falta a Llull". Demasiados finales parecidos como para que sean casualidad.