Donostia. Con un día de retraso debido a una fuerte nevada en Milán, Aitor Pérez Arrieta regresó ayer a casa "encantado" de su primera concentración con el Lampre-ISD. El azul y fucsia de la escuadra italiana será el séptimo maillot que el zegamarra luzca en ocho años como profesional. Antes vistió los de Cafés Baqué (2004), Spiuk (2005), Caisse d"Epargne (2006-2007), Extremadura-Spiuk (2008), Contentpolis-Ampo (2009) y Footon-Servetto (2010): "La incertidumbre de si tendrás equipo no es agradable, pero si luego puedo salvar el año, ni tan mal...", valora.
Por tercera temporada seguida, el guipuzcoano tendrá un dorsal "gracias a Ampo", cooperativa que tras asociarse antes a Contentpolis y Footon, desde el pasado Tour colabora con Lampre. "Tal y como están las cosas, tengo suerte por seguir. Algún día se acabará esto, pero tengo 33 años y cuando llegue ese momento me pillará con una edad como para asumirlo con naturalidad".
Por el momento, en 2011 disfrutará en un conjunto "de los grandes", en el que sobresalen "Cunego, Petacchi, Scarponi y Kashechkin", sin olvidar a Gavazzi, Hondo, Bole, Spilak, Bertagnolli o la perla Ulissi.
Tras Juanma Garate, Patxi Vila e Igor Astarloa, Pérez Arrieta será el cuarto euskaldun en Lampre, empresa que llegó al pelotón en 1990, cuando se unió al Diana-Colnago en el que Giuseppe Saronni dio sus últimas pedaladas. Desde 1991, cuando el bicampeón del Giro se inició como director, la firma de la familia Galbusera respalda a Beppe.
Desde el pasado domingo, la formación italiana se concentró en Darfo Boario Terme, a unos 60 kilómetros al norte de Brescia. "No cogimos la bicicleta", porque el objeto del stage era "que nos tomaran las medidas de la ropa y la bicicleta, pasar unas pruebas físicas en el Centro Mapei, planificar calendarios...".
"La primera impresión ha sido buenísima. Sobre todo he visto una gran infraestructura. Al fusionarse con el ISD (de Ucrania), hay siete ciclistas y dos o tres directores ucranios. También hay un húngaro, algún esloveno... Hay nueve directores, casi más que corredores -bromea-, algo que no había visto nunca: en el Caisse d"Epargne tuve tres, en el Footon, cuatro. Así que imagínate el montón de auxiliares que hay...". La ONU del Lampre-ISD se comunica en italiano, un idioma que "no controlaba nada salvo las cuatro cosas de siempre, aunque no es tan difícil de entender. Intentaré hacer pronto el oído".
De los directores, el referente que le han asignado a Aitor es Valerio Tebaldi, a quien recuerda "de cuando me tocó en una porra de las que hacía en la ikastola para el Giro; no me dio mucho dinero", sonríe el de Zegama, que, como este año, arrancará la campaña en el Tour Down Under. "Estaremos unos veinte días en Australia, bajo el sol, lo que viendo el tiempo de aquí, se agradece".
Su temporada proseguirá en la Volta a Catalunya y la Vuelta al País Vasco, aunque antes "tampoco está descartada la París-Niza". Tras la ronda vasca, "igual haría alguna clásica (de las Ardenas) o Romandía y Turquía. Es fijo que no haré el Giro y sí la Vuelta. También me gustaría ganarme un hueco para el Tour".
Dada la talla de los líderes del equipo, Pérez Arrieta es consciente de que "me tocará un papel similar al que podía tener en el Caisse d"Epargne. Aunque tendré oportunidades para aprovechar cuando me encuentre bien de forma, me ilusiona trabajar también como gregario de hombres como Cunego o Petacchi".
Desde 2005, el Pequeño Príncipe, que en 2011, y como en 2008, hará Tour y Vuelta, es el capo del Lampre. En 2010, el veronés firmó su primer año sin triunfos y se planteó cambiar de aires. Sonó para el Sky, pero renovó bajo tres premisas: que Saronni fichara a un líder que le supla en el Giro (Scarponi) para así volcarse en la trilogía ardenesa, que Aldo Sassi (director del Centro Mapei) le volviera a llevar la preparación como en sus inicios, y la contratación de Roberto Damiani, que dirigía al Omega-Lotto. "Han destacado la capacidad de organización de Roberto. No sé si será por él, pero me ha llamado la atención lo programado que estaba todo", alaba Pérez Arrieta, feliz por su entorno azul y fucsia.