aitor Osa fue ciclista profesional durante once temporadas. Cuatro años después de abandonar el ciclismo, el ex corredor de Itziar se ha convertido en un destacado participante en carreras de montaña. Ayer, en la Zegama-Aizkorri, destrozó todos los pronósticos con una excelente segunda plaza en su primera maratón alpina.

Osa explicó que no lleva "ni un año" dedicándose a esta modalidad: "Empecé en julio pasado. Me llamaron de Zumaia para la Flysch Trail porque querían que fuera algún nombre conocido, y fui tercero junto a Zuhaitz Ezpeleta. Luego gané otras tres carreras, y este año sólo he corrido dos. Quería participar en más, pero las lesiones no me han dejado". El ex ciclista, de 36 años, empezó a preparar la Zegama-Aizkorri "desde Navidades. Lo he pasado mal porque he tenido un montón de lesiones y pensaba que no iba a venir. La semana pasada dije que no iba correría, porque he estado jodido después de la carrera de Arratzu -la Urdaibai Mendi Lasterketa del pasado 2 de mayo, en la que fue segundo tras recorrer los 30 kilómetros de la prueba-. Al final, el martes pasado hice una prueba en casa y no me quedé muy conforme, pero me dije voy a arriesgar. De hecho, he salido con cuatro números de teléfono en el bolsillo, por si me retiraba, para llamar a la mujer, a los padres y a los tíos. Si no aparecía entre los veinte primeros se iban a mosquear y lo iban a pasar mal".

El monte parece el hábitat natural de Osa, ya que en 2002 también se impuso en la clasificación de montaña de la Vuelta a España -en el mismo año que ganó la Vuelta al País Vasco-: "Pero el ciclismo y las carreras a pie son diferentes. Si corres una carrera de éstas mañana no puedes volver a hacer otra, y en bici se pueden correr dos etapas seguidas. Yo por lo menos, no me recupero tan bien cuando corro".

El ex corredor logró buena parte de su renta en la meta en los tramos cuesta arriba: "Donde mejor me suelo defender es en las subidas, que es donde saco la diferencia. Peso poco y estoy bastante acostumbrado a andar por el monte. Tampoco bajo mal, pero hay mejores que yo".

Osa se mostró satisfecho por su segundo puesto: "Para mí, es como haber sido primero. He ganado otras carreras, pero este segundo puesto es lo mejor". "Si me respetaba la lesión, estaba conforme con clasificarme entre los diez primeros. Estar entre los cinco primeros ya hubiera sido excelente, y no me esperaba ser segundo ni por el forro".

El de Itziar destacó la dificultad de la prueba: "El recorrido es duro y con este tiempo, más. Había un montón de barro. Arriba estaba un poco peligroso. En la bajada a Urbia la nieve patinaba un montón y lo he pasado bastante mal. Eso sí, el ambiente es impresionante".

Osa terminó la prueba "bastante bien. Nunca había hecho más de treinta kilómetros en una carrera, pero he aguantado bien". Aún así, el ex corredor aún no ha decidido si participará en más pruebas de montaña: "Antes ganaba dinero en el ciclismo, y para pasarlo mal y no ganar dinero, no sé lo que haré. Ahora, de momento, voy a recuperarme". Y tampoco tiene claro si volvería a la Zegama-Aizkorri el próximo año: "Tengo a la madre y a la mujer en mi contra, así que no lo sé", bromeó.