El pasado jueves, 5 de diciembre, Euskadiko Orkestra ofreció un nuevo programa de abono de su Temporada 2024 / 2025 en Pamplona, en el que contó con el violinista israelí Pinchas Zukerman como solista y como director durante una parte del concierto. En un momento dado, el músico se dispuso a interpretar una canción de cuna de Paul Ben-Haim, anunciada en el programa, y, en ese instante, varias personas se levantaron de sus asientos, protestaron por la inclusión de esta obra, exhibieron banderas palestinas, condenaron el genocidio que Israel acomete contra el pueblo palestino y abandonaron la sala.
Desde la orquesta han querido responder a lo sucedido y a los mensajes que le han llegad posteriormente a través de un comunicado de prensa en el que señalan que ante la "evidencia" de la "ofensa sentida por un amplio público, que abandonó la sala antes de la interpretación de la obra Berceuse Sfaradite, lamentamos la situación creada y expresamos con contundencia que Euskadiko Orkestra no hace apología de ningún genocidio ni causa bélica".
Asimismo, la entidad reconoce que la protesta del público fue "respetuosa", y Euskadiko Orkestra "no impidió que esta se llevara a cabo", tampoco el director y violinista Pinchas Zukerman, "quien esperó a que saliera el público antes de la interpretación de la citada obra". "La bandera de Palestina quedó sobre el escenario durante la interpretación del Concierto para violín nº5 de Mozart y hasta finalizar toda la primera parte del concierto", agregan.
No se interpretó el himno de Israel
Euskadiko Orkestra interpretó Berceuse Sfaradite, una canción de cuna de 4 minutos, "compuesta por una cantante yemení y orquestada por Ben-Haim en el año 1945". "No era ninguna obra en apoyo a Israel", subrayan desde la orquesta. Y siguen: "Es importante señalar que no se tocó el Himno Nacional de Israel, como se ha podido interpretar en la octavilla entregada en el concierto por la plataforma BDZ Nafarroa o se ha señalado en algún medio de comunicación y red social". Es posible que la confusión se diera por el hecho de que Ben-Haim fue el responsable de su orquestación más conocida.
Tras un cambio de programa, Pinchas Zukerman asumió también la dirección de este concierto, en donde inicialmente estaba anunciado solo como solista. "Se sustituyó Bruch y Bruckner por obras de Mozart y Beethoven, además de una breve canción de cuna de Ben-Haim, un "compositor nacido a finales del siglo XIX en Alemania y fallecido en 1984". "Ante la tesitura de tener que rediseñar con agilidad un programa de concierto, la elección a veces está condicionada por las obras que el artista tiene en ese momento en repertorio", continúan.
Pinchas Zukerman es violinista y director de orquesta, es la cuarta vez que ha compartido escenario con Euskadiko Orkestra y la segunda en la doble función de solista y director.
Para terminar, desde la orquesta señalan que la historia de la música "tiene muchos casos de obras o compositores que forman parte del repertorio habitual y cuya interpretación comprendemos que podría llevar a controversia. Hay multitud de ejemplos como Aleksander Nevsky de Prokofiev, Carl Orff (autor de Carmina Burana, del que se especula que tuvo carné nazi) o Bruckner (el día en que murió Hitler la radio alemana emitió su Séptima Sinfonía en su recuerdo)".