Hubo un tiempo en el que Gipuzkoa era un hábitat perfecto para osos cavernarios, guepardos, hienas, jaguares y tigres dientes de sable. Un ecosistema prehistórico en el que destacaba por encima de todos el león cavernario, familiar de los actuales leones, pero más grande y mucho más pesado. Las cuevas de Arrikrutz, en Oñati, fueron un perfecto refugio para estas especies. Además de ser una de las cuevas más extensas de Gipuzkoa, constituyen uno de los mejores escaparates del paisaje kárstico de Euskadi y en ellas tuvo lugar uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes del Estado: el hallazgo del león cavernario.

Era el 3 de marzo de 1966 cuando Iñaki Zubeldia y Jesús Manuel Maroto, estudiantes del seminario de Aranzazu y amantes de la espeleología, se perdieron en las galerías de Arrikrutz y dieron con el ya famoso esqueleto. Se trata del león cavernario más completo de la península ibérica y en toda Europa no hay más que cinco ejemplares similares. Su gran valor radica en que se conserva prácticamente entero, incluso los huesos de la cola, algo que es muy poco común. Gracias al buen estado de conservación se puede apreciar el tamaño que alcanzaba el animal. Un metro y diez centímetros desde el suelo al torso superior, metro y 40 centímetros con la cabeza al alza, un cráneo de 80 centímetros, y aproximadamente 250 kilos de peso, cuando los leones actuales rondan entre los 150 y 190.

Arrikrutz cuenta hoy con una réplica del esqueleto, uno de los principales atractivos de estas cuevas aptas para conocer en familia.

Según explican en la oficina de turismo de Oñati, la visita más demandada es la que se realiza a la galería 53, un recorrido guiado de 500 metros de longitud y 50 metros de desnivel, de una hora de duración, a través de una pasarela acondicionada. Aquí, el visitante puede descubrir la joya geológica de Arrikrutz: las estalactitas, estalagmitas y demás elementos de la cueva, así como la réplica del león cavernario o los restos de los osos de las cavernas. Además, indican, puntualmente (entre 80 y 90 días al año) se puede ver el río que formó la cavidad.

El precio general de esta actividad es de nueve euros por persona y de seis euros para menores de entre cinco y 16 años y colectivos como pensionistas o desempleados.

Las visitas se llevan a cabo en euskera a las 12.00 y a las 16.00 horas, y en castellano a las 11.00, 13.00, 17.00 y 18.00 horas.

Además, Arrikrutz ofrece la visita Espeleotxiki, dirigida especialmente a las y los más pequeños (mayores de seis años) junto a sus familias. En este recorrido, la aventura comienza tras conocer las réplicas de los animales prehistóricos ubicados en la Galería 53 y una vez abandonada la pasarela. Es una vivencia que mezcla tanto aventura espeleológica como la exploración del mundo subterráneo, siempre con los más pequeños como principales protagonistas. Tiene una duración de dos horas y media y un precio de 20 euros por persona.

Finalmente, para aquellos adultos amantes de la aventura y la espeleología, la cueva de Oñati ofrece Espeleo Arrikrutz, un recorrido de espeleoturismo dirigido a mayores de 18 años, de tres horas y media de duración. "En esta visita guiada, el y la visitante disfruta de las singularidades geológicas, así como de la gran excéntrica de Arrikrutz y, a su vez, pueden gozar de la hermosura que nos ofrece el cauce subterráneo del río Aldaola", explican dese la oficina de Turismo de Oñati, que advierten de que, aunque el recorrido no tiene una dificultad técnica, sí que está dirigido a personas en buen estado físico.

Desde Arrikrutz recomiendan que quienes estén interesados en hacer alguna de estas actividades, reserven previamente en el 943 082 000 o en arrikrutz@onati.eus. l

l Cómo llegar. Una vez en Oñati, tomar dirección Arantzazu por la carretera GI-3591. Una vez que la carretera empieza ascender y a serpentear, al llegar al kilómetro tres coger el desvío de la derecha que indica Araotz. A 1,2 kilómetros está el aparcamiento y la senda peatonal que llega hasta las cuevas.

l Recomendaciones. Se recomienda a los visitantes acudir con ropa cómoda y deportiva, además de algo de abrigo, ya que en las cuevas la temperatura es de diez grados menos que en el exterior y la humedad alcanza el 90%. Además, el calzado debe ser cómodo y deportivo. En el caso de participar en la actividad Espeleo Arrikrutz, se pide calzar zapatillas de montaña o katiuskas, además de ropa y calzado de recambio

l Reservas. Para realizar cualquiera de las actividades ofertadas, se recomienda reservar previamente en el 943 082 000 o en el mail arrikrutz@onati.eus.

Las cuevas de Arrikrutz ofrecen tres itinerarios en función de la complejidad del recorrido, dos de ellos aptos para realizar con menores