- Puede que el COVID-19 haya cambiado muchas cosas desde marzo, pero no la costumbre que tiene el Gobierno Vasco de dar a conocer cada año el palmarés de los Premios Euskadi de Literatura en dos tandas. Ayer, con Artium como escenario y el consejero de Cultura Bingen Zupiria como anfitrión, fue el turno de tres de los galardones. La próxima semana llegarán los cuatro restantes. Todo con la mirada puesta en el 19 de noviembre, cuando en el bilbaino Azkuna Zentroa se celebre el acto oficial de entrega de las distinciones, cada una de ellas dotada con 18.000 euros, más 4.000 si la obra reconocida es traducida a otra lengua.

El museo de arte contemporáneo de la capital alavesa es un lugar que la escritora y periodista gasteiztarra Karmele Jaio conoce bien, claro que ayer regresó para ser reconocida con el Premio Euskadi de Literatura en Euskera gracias a Aitaren etxea (Elkar), novela publicada hace poco menos de un año a través de la cual la escritora habla de las maneras de construir y transmitir la masculinidad y de la influencia del género en la vida de mujeres y hombres. “No fue un libro fácil de escribir porque tenía muchas dudas y me sentí muy sola frente a la página en blanco. Por eso, tengo que agradecer a los lectores y lectoras cómo me han acompañado, y lo siguen haciendo, desde que se publicó la novela”, apuntó la autora, colaboradora de NOTICIAS DE GIPUZKOA. En su caso, el jurado de la actual edición de los premios ha querido reconocer con este galardón la “valentía formal de esta novela psicológica y la habilidad de Jaio para expresar las emociones y contradicciones de los seres humanos”.

En lo que respecta al Premio Euskadi de Literatura Infantil y Juvenil en Euskera, la distinción fue a parar a Pamplona, a las manos del poeta y también periodista Iñigo Astiz Martínez, quien, eso sí, no quiso olvidarse, en sus palabras a la hora de agradecer el galardón, de la labor de la ilustradora Maite Mutuberria Larrayoz en Joemak eta Polasak (Elkar). “Todo este libro es un juego. Nació como un juego, su motor es el juego y lo que busca es un juego sin cesar. Está lleno de trampas por todos los lados, salvo en el lomo, que es el único sitio donde no intervinimos, aunque no se nos escapará la próxima vez”, comentó con una sonrisa el creador. En este caso, el jurado destacó que este “transgresor” poemario cuenta con una “cuidada y elegante edición, como se merecen las niñas y los niños y quienes lo fueron” no hace tanto.

También a la capital de la comunidad foral llega el tercero de los galardones que se dieron a conocer ayer. El Premio Euskadi de Ilustración de Obra Literaria es, en este 2020, para el trabajo en Un millón de ostras en lo alto de la montaña (Flamboyant) de Miren Asiain Lora. “El estilo de la ilustración de Asiain es muy personal. En este libro sobre el misterio de los fósiles y la magia de la geología, la originalidad, la coherencia, la ambientación mágica y las texturas contribuyen a generar una atmósfera especial”, según el jurado que ha decidido la concesión de este reconocimiento . “Tras un proceso largo y solitario es algo muy bonito ver que se valora tu trabajo”, describió la artista.

La próxima semana se darán a conocer los ganadores en las otras categorías de los Premios Euskadi: Literatura en Castellano, Ensayo en Euskera, Ensayo en Castellano y Traducción Literaria al Euskera. Será el penúltimo paso antes de la gala de entrega de distinciones que se producirá el 19 de noviembre en la capital vizcaina.

Karmele Jaio. La periodista de Gasteiz es autora de una extensa obra literaria en diversos géneros: los libros de cuentos ‘Hamabost zauri’, ‘Zu bezain ahul’ y ‘Ez naiz ni’, las novelas ‘Amaren eskuak’, ‘Musika airean’ y ‘Aitaren etxea’ y la colección de poemas ‘Orain hilak ditugu’. Sus libros han sido traducidos a varios idiomas, adaptado al cine y al teatro, y ha obtenido numerosos premios.

Iñigo Astiz. El poeta y periodista nacido en Iruña también recibió el año pasado recibió el premio Lauaxeta por la colección de poemas ‘Analfabetoa’. Anteriormente también publicó ‘Baita hondakinak ere’ (2012) y ‘Kixotenean kronika’ (2016).

Miren Asian. Ha participado en diferentes exposiciones en China, Japón, Corea, Italia, España, Argentina, México y Nueva York, y ha recibido numerosos premios, como el Etxepare 2012 por la obra ‘Hara’.

“Joemak eta polasak’ está lleno de trampas; el lomo del libro es el único sitio donde no hemos jugado”

Literatura infantil y juvenil en euskera