París - Los clichés románticos de la ciudad de París se han visto superados por la magia de Hollywood, que convirtió la capital francesa en el escenario de la nueva película de Tom Cruise, Misión Imposible-Fallout, presentada a nivel mundial ante la Torre Eiffel. La sexta entrega de la saga de acción que el actor inició en 1996 con Brian de Palma es, según contó su nuevo director, Christopher McQuarrie, “una oportunidad para celebrar la ciudad de París”.
“Estábamos preparando esta película en 2015 sin haber decidido dónde rodaríamos la nueva entrega. Tras los atentados de ese año en Francia, propuse a Tom enseñar esta ciudad, pero temía que fuera peligroso. Tom me dijo que precisamente por eso debíamos hacerla aquí, para demostrarle a la gente que no lo es”, contó McQuarrie en el estreno.
A pesar de su brío internacional, París no está acostumbrada a la alfombra roja que invadió la plaza de Trocadero, donde cientos de personas esperaron para poder retratarse junto a Cruise y el resto de protagonistas, Henry Cavill (El hombre de acero) o Rebecca Ferguson (La reina blanca). “Los parisinos estaban muy contentos de tenernos aquí, se mostraron dispuestos a ayudar y yo tuve mucho cuidado de no destrozar la ciudad. Cuando iba conduciendo el coche estaba tan nervioso, no quería dañar ningún edificio y no lo hice, fui muy cuidadoso”, confesó Cruise.
En Fallout, que llegará a los cines el próximo 27 de julio, el equipo de Misión Imposible se ve inmerso en una operación de alto riesgo que les llevará por París, aunque también por Londres y la región de Cachemira (por razones de seguridad estas imágenes se grabaron en Nueva Zelanda) para evitar un ataque terrorista global.