donostia - La escultora navarra Dora Salazar busca cuestionar los roles y condicionamientos de las mujeres con la exposición Venus, princesas, que se puede visitar hasta el 15 de mayo en la sala Menchu Gal de Irun. Se trata de una muestra en la que se representa la forma en que se viste la mujer en función de la apariencia que quiera ofrecer, con lo que la artista pretende transmitir el concepto de que el cuerpo humano es “mutable” y cambia “a través del tiempo”.
La figuras que exhibe Salazar están construidas con cuerda, cuero, acero e hilo de cobre, y están suspendidas del techo, lo que les dota de una sensación de ser parte de un desfile que la autora define como “carnavalesco”. La colección que muestra está compuesta por un total de 12 piezas: cuatro de ellas son figuras a escala humana, mientras que otras cuatro son caras o máscaras, dos torsos y otras dos piezas se puede contemplar en una vitrina.
La escultora Dora Salazar ha supuesto el aporte de nuevas formas de generar y organizar significados en la práctica cultural, y siempre ha sido impulsora de nuevos valores y nuevas reflexiones culturales, como bien se puede comprobar con esta exposición, que tiene como fin visibilizar a la mujer y los condicionamientos que ha sufrido a lo largo de la historia. Por eso, Venus, princesas, encaja dentro de la iniciativa del Ayuntamiento de Irun que pretender dar visibilidad a la obra de las mujeres artistas y a la reflexión entorno al género femenino.
También está prevista una charla-conferencia sobre la exposición y, todos los viernes por la mañana, tendrán lugar visitas guiadas, para las que es obligatorio apuntarse. Por lo demás, la muestra estará abierta los viernes y sábados, de 18.00 a 21.00 horas, y los domingos y festivos, de 11.30 a 13.30. - N.G.