Donostia. Por medio de una carta publicada en su web bajo el título "Esto es por lo que se me quiere sancionar", Alberto Contador explica que "en su día (...), cuando se detectaba clembuterol u otra sustancia era porque la cantidad hallada era más que suficiente para mejorar el rendimiento y solo podría aparecer en el organismo cuando, voluntariamente, fuera ingerida con esta finalidad. De ahí que en determinadas sustancias exista un umbral que solo superándolo es constitutivo de delito y sancionable a nivel deportivo".

Puntualiza que, hoy, "los avances de la ciencia" detectan "cantidades ínfimas" de "sustancias prohibidas que ni favorecen el rendimiento" "ni se pueden tomar voluntariamente, salvo que entre en nuestro organismo con la ingesta de alimentos; este es mi caso con el clembuterol". Sin embargo, "si los avances de la ciencia" se hallan "en 2011, la norma está estancada en los años 60, de ahí mi delito y posible sanción. Solo equiparando los avances científicos con las modificaciones de la normas antidopaje se podrá hablar de deporte honesto y justo, como el que he practicado".