El 9 de mayo de 2023 presenté a Capitanía Marítima de Pasaia, que tiene competencias en Seguridad Marítima, una solicitud para que se prohibiera de manera explícita a la empresa Motoras de la Isla atravesar el peligroso arrecife de la bocana occidental de la bahía de La Concha, entre la isla de Santa Clara y el monte Igeldo. Desde entonces no he recibido contestación ni explicación alguna al escrito, ni a favor ni en contra de la propuesta. A diario observo que dos embarcaciones atraviesan este peligroso promontorio para acercar a los turistas por el mar hasta el Peine del Viento, cuando por calado la entrada y salida natural de barcos está indicada por la bocana oriental de la bahía, entre la isla de Santa Clara y el monte Urgull. Antes de que se produzca un accidente y se genere una desgraciada catástrofe con decenas de víctimas, he decido hacer una reclamación pública ante los medios de comunicación para prevenir por todos los medios a mi alcance dicha conducta, y evitar además que los tribunales tengan en un futuro que juzgar a los culpables, tanto por acción como por omisión. Desde que en el año 2016 el acceso peatonal al Peine del Viento (Donostia) estuvo cortado durante varios meses, con motivo de las obras de estabilización de la ladera superior, al menos dos barcos turísticos con itinerario autorizado por el interior de la bahía de La Concha atraviesan habitualmente la bocana occidental (entre la isla de Santa Clara e Igeldo), por encima del arrecife de rocas, para que los turistas puedan fotografiar la famosa escultura de Eduardo Chillida y/u observar la diversidad del fondo marino de la rasa intermareal de Arroka frente a Ondarreta. La entrada-salida natural de la bahía, sin peligro por calado suficiente, siempre ha sido la bocana oriental entre la isla de Santa Clara y el monte Urgull y el mar no perdona las negligencias humanas. Las costas de todo el mundo están plagadas de pecios que estaban gobernados por capitanes considerados "viejos lobos de mar", que en un momento de su dilatada experiencia se equivocaron y provocaron una tragedia. Por ello, he señalado a la Capitanía que se debería prohibir a estos dos barcos, de manera explícita y absoluta, y al margen de la consideración subjetiva del estado de la marea, atravesar el arrecife o barrera de rocas de la bocana occidental de la bahía de La Concha entre Santa Clara e Igeldo para evitar peligros innecesarios.
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