Los vecinos de Linares, en Jaén, se encuentran atemorizados desde hace unos días por los continuos ataques de unos pájaros, que se lanzan a picarlos en la cabeza cuando transitan principalmente por una calle de la localidad.
Vecinos atacados
Son rabilargos ibéricos, aves paseriformes de la familia de los córvidos endémicas de la península ibérica (hay una especie muy parecida en Japón), y se han convertido en protagonistas al hacerse virales diferentes vídeos que los vecinos de esta ciudad andaluza están subiendo a las redes. En ellos muestran cómo estos pájaros atacan a los viandantes, principalmente en la transitada calle La Cruz, pero también en el Recinto Ferial y en el Paseo de Linarejos.
Las quejas y denuncias de los vecinos, que están viendo cómo esas aves los atacan repentinamente lanzándose casi en vertical contra sus cabezas, han llevado al Ayuntamiento de Linares a publicar un comunicado en sus redes sociales pidiendo tranquilidad a la población.
No atacan, se defienden
El Consistorio afirma que los ataques se producen en zonas próximas a donde los pájaros han anidado, y que no se trata de un comportamiento agresivo de las aves, sino de una conducta instintiva y temporal propia de su época de cría, que comprende entre abril y junio.
Durante estos meses, los rabilargos muestran una actitud defensiva denominada mobbing, que consiste en vuelos cercanos, emisión de sonidos y aproximaciones a las posibles amenazas que perciban. Su intención es únicamente proteger sus nidos y a sus crías y en ningún momento es una agresión deliberada contra las personas, sino una respuesta instintiva de defensa territorial.
Consejos ante un rabilargo
El Ayuntamiento de la localidad jiennense aconseja durante estos meses no transitar cerca de donde se hayan identificado nidos de rabilargo y mantener una distancia prudente con los árboles o arbustos donde estas aves puedan haber anidado. Además, recomienda no intentar tocar ni acercarse a los nidos o a las crías y no entrar en pánico si se aproxima volando un rabilargo, ya que su intención es disuasoria. Lo más conveniente es mantener la calma y alejarse lentamente del área.
Los rabilargos ibéricos, que practican la cría colectiva (varios ejemplares que no son padres de las crías colaboran en su cuidado y alimentación), habitan principalmente en el centro de la península, lejos de la costa. Así, se pueden encontrar en el norte de las provincias de Jaén, Córdoba, Sevilla y Huelva, además de en Extremadura, en Toledo y Ciudad Real, en Segovia, Soria, este de Salamanca y sur de Burgos y en Madrid.