El Bidasoa Irun quiere hacer historia este martes y superar por primera vez los octavos de final de la European League desde que hace tres años cambió su formato. Para ello deberá ganar al favorito Sporting en Lisboa o, como mínimo, hacer valer la renta de tres goles que logró en el partido de ida en Artaleku (30-27). Un resultado que, paradojas de la vida, ya cosechó hace meses en la ida frente al poderoso Kolstad noruego, al que terminó eliminando en Trondheim a penaltis para acceder a la Fase de Grupos.

Casi seis meses después de aquella gesta, en la que tumbó a domicilio un equipo que con 2,4 millones de euros casi cuadruplica la masa salarial bidasotarra (y el año que viene los noruegos subirán a más de 4,5 millones), el Bidasoa Irun viaja este domingo a la capital lusa desde Madrid, donde ha hecho noche tras el triunfo a domicilio ante Cívitas Guadalajara en la reanudación liguera (25-30). Un duelo que los de Jacobo Cuétara estuvieron a punto de romper en su primera mitad y les tocó sufrir en la segunda, donde, a diferencia de otros partidos ligueros de esta temporada lejos de Artaleku, supieron jugar con la tensión y llevarse el gato al agua.

Antes del partidazo del próximo domingo ante Logroño La Rioja en Artaleku (18:30 horas), Europa vuelve a escena para los jugadores de Jacobo Cuétara, y lo hará con el billete a los cuartos de final en juego y en un escenario conocido, en el que en la Champions de hace tres años estuvo a punto de ganar y se llevó un punto tras el empate a 30.

Sobre la situación de ambos equipos, tanto Bidasoa como Sporting llegarán al martes tras solventar sus compromisos ligueros. Los irundarras, en Guadalajara, y los lisboetas, en casa contra Avanca, a quien vencían al descanso 17-11 y emborronaron su actuación en la recta final, donde no llegaron a ver peligrar el marcador (32-28 final; 15-17 en la segunda parte). Los portugueses, con actuación destacada del capitán Salvador Salvador (9 goles), siguen líderes invictos de su Liga con un punto de ventaja sobre Oporto y Benfica, el próximo rival de los leones en la Copa. Antes les llega la vuelta de la eliminatoria europea, que su entrenador, Ricardo Costa, ya empezó a calentar tras el choque de la ida y que este sábado ha vuelto a pedir que “el pabellón João Rocha sea un volcán para que le demos la vuelta a la eliminatoria”.

Lo que dice la historia

Si entramos a fondo en los precedentes, la historia del club guipuzcoano más laureado a nivel continental arroja un balance positivo en las eliminatorias europeas en las que el Bidasoa ha tenido que certificar los pases lejos de Artaleku. Sin tener en cuenta los duelos que se han jugado de manera íntegra en Irun por acuerdo de ambos equipos, el club irundarra ha viajado al segundo partido con ventaja hasta en 13 ocasiones, logrando el pase en 10 de ellas.

Desde la primera eliminatoria europea que a los irundarras les tocó jugar la ida en Artaleku (contra el Sporting Neerpelt belga, en la Copa de Europa de 1987/1988; triunfo 15-14 en la ida; y 17-18 en la vuelta) hasta la última de esta temporada, la citada victoria contra Kolstad, el Bidasoa consiguió eliminar al ABC Braga (Recopa 1991, ronda 1: 28-18 y 21-30), al Teka (Recopa 1991, semifinales: 22-20 y 24-24), al Niederwürzwach (Copa EHF 1993, cuartos: 25-20 y 23-26), al Dukla Praga (Recopa de 1997, octavos: 30-20 y 25-26), al Fortuna Sittardia (copa EHF 2001, ronda 2: 28-19 y 23-30), al ABC Braga (30-27 y 27-27) y al propio Kolstad.

Entre las diez superadas faltan dos eliminatorias, que más que eliminatorias son las dos grandes finales europeas de los 90: los diez goles de renta que los de Juantxo Villarreal llevaron a Zagreb en la Copa de Europa de 1995 y la Recopa de 1997, cuando Elgorriaga voló a Veszprem con el 24-19 logrado en la ida en Irun.

Sin tener en cuenta las eliminatorias que han salido de Artaleku con el equipo irundarra ya en desventaja (como el año pasado contra GOG), el Bidasoa ha quedado apeado en tres ocasiones al terminar el partido de vuelta: dos veces contra equipos alemanes, el Tussem Essen en la Recopa de 1988/1989 (25-22 en Irun; 29-22 en tierras germanas) y en la infausta final de la misma competición en Augsburgo, donde los cinto tantos de la ida contra Milbertshofen en mayo del 91 (20-15) fueron insuficientes con la encerrona de la vuelta (24-18).

La tercera fue hace bien poco y también con el mismo resultado que el martes pasado y que esta temporada contra Kolstad: el 30-27 que el equipo de Jacobo Cuétara consiguió para ir a Croacia contra Nexe, que daría la vuelta (29-24) en European League de la temporada 2020/2021. Este martes, el equipo amarillo tendrá en juego seguir escribiendo historia y, sobre todo, un billete a cuartos de final.