donostia - Durante las últimas tres temporadas, el IDK Gipuzkoa ha tenido en plantilla a un bloque consolidado de cinco jugadoras guipuzcoanas, que de cara al próximo curso se quedará en dos: Iulene Olabarria y Onintza Aduriz se retiran y Sara Iparragirre jugará en el Añares Rioja ISB -aunque vinculada al IDK-, así que serán Lara González y María Erauncetamurguil, cada vez más consolidadas en la categoría, las representantes locales en un equipo que tendrá muchas caras nuevas.
“La foto de las cinco de casa será muy difícil de repetir”, reconoce Aduriz haciendo referencia a la imagen que acompaña a este reportaje y resaltando el valor de haber competido al máximo nivel con media plantilla de casa: “Se han juntado dos generaciones buenas y es complicado que vuelva a haber cinco guipuzcoanas en la plantilla. Por eso el club está trabajando la cantera, para intentar tener el máximo número de jugadoras guipuzcoanas otra vez”.
Olabarria considera que habrá “un paréntesis” antes de que haya jugadoras nuevas del territorio en la máxima categoría: “No hay jugadoras que vayan a llegar de forma inminente. Habrá un paréntesis, las que parece que pueden llegar son jóvenes aún, así que habrá que trabajar y seguir esperando”.
La trayectoria de Olabarria y Aduriz, paso a paso hasta consolidarse en la elite, puede ser un buen espejo para las chicas que tienen el mismo objetivo: “Las jóvenes ahora igual tienen menos paciencia”, considera Olabarria: “Los saltos de categoría son grandes y, por muy buena que seas, tienes que adaptarte, aprender y tener paciencia”. - N.R.