donostia. Jimmy Baron no tendrá un buen recuerdo del primer partido de la temporada 2011-12. Tras impactar en su estreno en la Liga ACB, el escolta de Rhode Island afrontaba desde el domingo su segunda campaña en la mejor liga de Europa consciente de que no le resultará fácil repetir el rendimiento de la anterior, lo que quedó constatado a las primeras de cambio.

Baron jugó uno de sus partidos más flojos con la camiseta del Lagun Aro, saldado con un 1/6 en triples y un 2/5 en tiros de dos, por lo que se quedó en ocho puntos, aunque hay que reconocer que lo hizo bien en labores defensivas. Estuvo muy vigilado por la defensa del Obradoiro y tuvo que abusar de tiros forzados, lo que se tradujo en un porcentaje de acierto más bajo del habitual.

Además, el escolta del GBC se quedó sin un récord que tenía a su alcance. Ya había batido el año pasado el de porcentaje en tiros libres durante una liga completa, un 98,59% gracias a su 70/71. De esos 70 aciertos desde la línea de 4,60, los últimos 60 habían sido consecutivos, por lo que acariciaba la mejor marca de la historia de la ACB, en propiedad de Arvydas Macijauskas, con 63 aciertos seguidos desde la personal. Baron fue a la línea de tiros libres con 67-70 en el marcador a ocho segundos del final. Metió el primero y falló el segundo, por lo que se quedó en 61 aciertos consecutivos. Es decir, se quedó a solo dos de igualar la marca del exjugador del Baskonia.

Tras el encuentro, Sito defendió el trabajo de su jugador: "Tiene que aprender a que el equipo lo necesita, pero no podemos depender de él. Ha tenido tiros que en otras ocasiones mete y hoy ha fallado, pero él está trabajando bien y no hay ningún problema. Tiene que estar animado y el equipo confía plenamente en él. Baron es el mejor tirador de la competición".