Donostia. El de Harrisburg está encantado con Sito Alonso y admite que el equipo necesitaba un cambio tras los cuatro años con Pablo Laso al frente. En apenas diez minutos de conversación, Panko te contagia su entusiasmo e ilusión. Su objetivo oculto es disputar, por fin, una Copa o un play-off, algo que nunca ha logrado hacer.
Ha estado como una moto en pretemporada. Me imagino que estará deseando que empiece la liga.
La temporada pasada tuve la operación de tobillo y me costó más empezar, pero este año me he encontrado bien, no he estado lesionado ni con molestias. Estaba deseando volver a Donostia y ponerme a las órdenes de Sito. Hablé con él antes de venir y le dije que me gustaba su estilo en el Joventut y que tenía muchas ganas de empezar. Es totalmente distinto a Pablo, pero ha sido fácil adaptarme para mí. A Sito le gustan jugadores que entiendan el juego y me siento cómodo. Estoy contento.
¿Qué ha hecho en verano para llegar en tan buena forma?
Honestamente, no hay secretos. No jugué mucho a baloncesto, la verdad. Mi mujer cuidó de mi alimentación y he hecho vida familiar. Vivimos en una casa grande y tranquila en el bosque, y he estado con mis hijos y he jugado a golf con mi padre. Desconecté del baloncesto, pero unos días antes de empezar la pretemporada ya estaba ansioso por venir, sentía ese hormigueo en la tripa. Vine con muchas ganas por el entrenador nuevo, por los compañeros nuevos... Sito sabe lo que quiere, es un gran entrenador, inteligente, será un gran entrenador en esta liga para muchos años.
Tiene 33 años y cumple 34 el 29 de noviembre. Algunos jugadores enfilan su cuesta abajo con esa edad. En su caso es al revés.
Sí, me siento mejor que nunca, en forma. Siempre he sido un poco así, en el instituto y la universidad jugué mejor cuando me hice mayor. Me cuido y hago vida tranquila. Salir de fiesta perjudica a tu cuerpo. Me siento contento de jugar, disfruto haciéndolo y quiero seguir en activo unos cuantos años más.
Hoy se va a medir a Hopkins, excompañero y el más veterano de la liga con 38 años...
No he hablado con él últimamente, hemos perdido un poco el contacto. Quiero charlar un rato con él. Ahí está con casi cuarenta años, sigue jugando y ha vuelto a la ACB. Si te cuidas puedes jugar muchos años.
No es común que un jugador extranjero esté tantos años en la ACB y tantos en el mismo equipo.
Sí, creo que soy de los americanos más veteranos en la liga, me lo dijo el otro día un compañero. Es mi noveno año o algo así en la ACB. Me siento bien en esta liga y Donostia es ahora mismo mi casa. América es mi casa de vacaciones. Estoy contento de seguir jugando, si me sintiera mal o viera que no daba el nivel, lo dejaría. Cada temporada sigue siendo un reto para mí. Me hago mayor, pero sigo sintiendo ilusión, me gusta entrenar y jugar. Tengo grandes expectativas para este año. Somos un equipo diferente, con una mentalidad diferente.
Uno de esos retos es mantener su nivel jugando en otra posición, la de ala-pívot.
Estoy jugando de cuatro, pero es un cuatro abierto. No voy a estar mucho en el poste bajo, puedo abrirme y tirar, muchos ala-pívots lo hacen en esta liga. No hay muchos jugadores en esa posición que por ejemplo puedan penetrar como lo hago yo, quizás Caner-Medley. Estoy bien, con Sito puedes jugar en cualquier posición. Tenemos los puestos bien cubiertos, porque Vidal es un gran alero y Papamakarios puede jugar ahí. Cuando Korolev vuelva, si regreso al tres, por mí perfecto, no me importa. Así el equipo será más difícil de defender para los rivales, el cambio de posiciones puede desconcertarles.
Más de media plantilla es nueva.
Hay veteranos y jóvenes. Tenemos a Betts, un tío grande en la pintura... Tenemos de todo. Se trata de conjuntarnos, entrenar y hacerlo lo mejor posible en la cancha.
El principal objetivo es recuperar la ilusión de la afición.
El año pasado, durante la temporada, caímos en la rutina. Todas las semanas los mismos entrenamientos... este año hay una sensación diferente, Sito nos pide ambición. Hay que recuperar esa ilusión de nuestros seguidores, lo haremos compitiendo bien.
¿Se acomodó el club y el equipo la pasada campaña?
No sé si esa es la palabra, pero llevábamos cuatro años con Pablo y necesitábamos un cambio, hacer algo diferente, nuevos jugadores... Sito es totalmente distinto a Pablo. El cambio nos puede venir bien. Entrenamos duro, muy intenso. Sito sabe lo que quiere y tenemos que dar el 100%. Quiere que hagamos un juego muy intenso, correr, tirar si tenemos la opción, presionar. A veces puede salir mal, pero no quiere que bajemos la cabeza, sino que sigamos trabajando y atacando. Quizás el año pasado bajábamos la cabeza demasiado rápido. Sito nos dice que si hacemos un error, nos recuperemos rápido y sigamos jugando. Es una gran mentalidad, me gusta. Será un gran entrenador, un entrenador de un equipo grande, es inteligente.
Ha jugado 225 partidos en la ACB, pero aún no ha disputado ni una Copa ni un play-off
Sería genial hacerlo. Cada año hay que ponerse objetivos. Nunca es tarde para jugar una Copa o un play-off. Dentro de unos meses te podré responder. Ahora mismo, estoy contento de cómo hemos trabajado en pretemporada y de la pinta que tiene el equipo. Estoy deseando empezar. Me siento bien y quiero que los fans disfruten.