donostia. El Lagun Aro GBC se encuentra en un momento de la temporada muy delicado. Cuando nadie lo esperaba se ha visto envuelto en una dinámica de derrotas y mal juego demasiado larga y debe salir cuanto antes de ella si no quiere meterse en problemas. La cita de la semana pasada ante el Fuenlabrada en casa parecía el momento propicio para hacerlo, pero el equipo de Laso jugó su peor partido de la temporada y se metió más en el pozo.
Desperdiciada esa ocasión ante su público, lo que supuso la sexta derrota consecutiva, hoy tendrá difícil poner freno a la mala racha, ya que visita la cancha del Cajasol (12.30 horas, ACB 360), que figura justo delante en la clasificación pero que tiene potencial para estar bastante más arriba. Lo normal sería sufrir el séptimo tropiezo seguido, pero cualquier cosa cabe esperar de un Lagun Aro que, si bien tocó fondo hace siete días, hace quince fue capaz de plantar cara a todo un Barcelona.
El primer paso para recuperar su mejor nivel y aspirar al triunfo será volver a tener la actitud defensiva que faltó frente al Fuenlabrada. Además, jugadores clave como Salgado, Doblas y Panko deberán recuperar su juego, porque sin ellos será imposible ganar. También hará falta que el banquillo, sobre todo un Lorbek desaparecido, empiece a sumar cuanto antes. La última incógnita en lo que respecta al Lagun Aro es si jugará Tskitishvili. El ala-pívot ha estado inédito en los dos últimos partidos y el club está buscando algún jugador en su posición, pero él ha dicho que quiere quedarse y aportar, y Laso ha comentado que últimamente se está entrenando mejor. Quizás tenga algún minuto.
un equipo con problemas El Cajasol no lo está haciendo mucho mejor que el Lagun Aro. Construyó un equipo para estar entre los seis o siete primeros, pero en estos momentos marcha undécimo. Con Calloway lesionado, sus líderes son un Louis Bullock que no es el del Madrid, Tariq Kirksay y Paul Davis, además del ex del GBC Txemi Urtasun. Los problemas llegan en la posición de cuatro, donde ni Ivanov ni Katelynas están ofreciendo el rendimiento esperado.