- Trabajadores de centros de Atención Primaria acusaron ayer a Osakidetza de “dejadez” y de haber llevado a cabo una gestión “penosa” que “ha colapsado” los ambulatorios, cuyo acceso se ha hecho “prácticamente imposible” para los ciudadanos, lo que hace que su salud se haya “resentido”.

Médicos, enfermeras y personal administrativo de Atención Primaria se concentraron a las puertas de los centros de salud, convocados por los sindicatos Satse, ELA, LAB, CCOO y UGT.

Al acto llevado a cabo en el centro de salud de Ondarreta, en Donostia, se sumó, además, la coordinadora general de Podemos Ahal Dugu, Pilar Garrido, junto con la juntera de esta formación Marivi Izagirre, así como el portavoz de EH Bildu en las Juntas Generales, Juan Karlos Izagirre, y la parlamentaria de la coalición soberanista Nerea Kortajarena.

Dos representantes de los concentrados leyeron un comunicado en el que se denunció que la pandemia de covid-19 “no es la única razón” para justificar la “falta de medios personales y materiales”. “La gestión está siendo penosa y el impacto que tiene en la sociedad es evidente”, lamentaron. Entre las deficiencias, destacaron que el seguimiento de los pacientes crónicos, “se ha deteriorado por completo”, ya que “al poner el foco en la pandemia se ha negado una atención imprescindible, muchas veces con consecuencias penosas”. Además, hicieron extensiva “esta dejación” a “los hospitales y otros centros sanitarios”.

La secretaria provincial de Satse, Pilar Mendia, señaló que no descartan ir a la huelga porque la Atención Primaria está “totalmente colapsada”, por lo que algunas personas pierden la paciencia y se han llegado a producir agresiones “incluso físicas”, lamentó.