Las precipitaciones registradas ayer jueves en Gipuzkoa superaron ampliamente las previsiones. En la presa de Añarbe se midieron un total 134,9 litros por metro cuadrado y en Artikutza 150,1. Se trata del sexto registro de mayor precipitación diaria desde que Añarbe comenzó a registrar datos hace medio siglo.

La presa estuvo cerrada el jueves durante el peor momento de la jornada y ha podido retener en las últimas 24 horas un total 3,2 millones de metros cúbicos. Esta maniobra ha evitado una mayor presión al río Añarbe y, por consecuencia, al Urumea.

TREGUA A LA ESPERA DE MAÑANA

La mañana de hoy, muy fría, con mínimas de seis grados en Donostia y cinco en Arrasate, parece conceder por el momento cierta tregua. La Agencia Vasca de Meterología, Euskalmet, prevé para este viernes en Gipuzkoa cielos nubosos a muy nubosos pero con precipitaciones débiles que no podrán en alerta a las cuencas del territorio como el jueves.

Mañana sabado vuelve otro aviso amarillo por precipitaciones persistentes y la previsión de que se puedan acumular más de 60 litros por metro cuadrado a lo largo del día, según la previsión de la Dirección de Atención de Emergencias del Gobierno Vasco.

A la espera de lo que ocurra mañana, una vez que este viernes el nivel del Urumea ha comenzado a descender, a las 8:15 horas ha comenzado un nuevo desembalse controlado en la presa de Añarbe de 23 metros cúbicos por segundo, que podrá ir variando en función del nivel del río, y con el que se quiere aumentar el resguardo disponible.

Los servicios técnicos de Aguas del Añarbe permanecen atentos a la evolución de la situación, y darán cuenta de cualquier novedad relevante que se produzca.