- La agresión homófoba a un joven en Madrid este fin de semana ha hecho saltar las alarmas y el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, presidirá este viernes una reunión de la Comisión de seguimiento del plan de lucha contra los delitos de odio, convocada de urgencia ante la gravedad de los últimos ataques.

Con el asesinato del joven Samuel en A Coruña también en la memoria, el colectivo LGTBI+ tiene miedo y el Ejecutivo español prometió “actuar sin demora” y estudiar “nuevas herramientas” para luchar contra cualquier intimidación por motivo de orientación sexual, raza o ideología. Mientras, la Policía investiga la agresión denunciada este fin de semana en Madrid, donde ocho encapuchados asaltaron en el portal de su casa a un joven de 20 años, le tiraron al suelo, le cortaron el labio y le grabaron la palabra maricón en el glúteo. Sánchez pedirá también a los grupos parlamentarios que aceleren la tramitación de la Ley para la igualdad de trato y la no discriminación, la conocida como ley Zerolo, mientras que Igualdad se ha comprometido a agilizar el desarrollo del anteproyecto de Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI+.

“Sin duda estamos pagando las consecuencias del incremento del discurso de odio no solo en redes sociales sino también en instituciones y responsables de partidos políticos”, denunció la directora general de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI+, Boti G. Rodrigo. La condena política a lo sucedido fue unánime, pero desde el Ejecutivo, dos ministras de Unidas Podemos, Irene Montero y Ione Belarra, criticaron a través de Twitter al PP por desligar los graves sucesos ocurridos de “los discursos de odio” que promueve Vox, a raíz de que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, considerase “excesivo” trazar esa conexión.