- El llamado efecto fin de semana, por el que suele haber menos contagios al realizarse también menos pruebas diagnósticas, no disimula el avance sin control de la quinta ola del covid, con cifras de positividad alarmantes. Euskadi registró el sábado 1.206 nuevos positivos 432 menos que en la jornada anterior. Una cifra engañosa ya que la tasa de positivos se ha elevado en tres décimas, hasta el 14,1% al haberse realizado 8.575 pruebas diagnósticas, muy por debajo de las 11.888 del día previo. Conviene recordar que el 5% ya es considerado por la OMS como umbral de riesgo que propicia la transmisión comunitaria.

Por otro lado, los hospitales siguen acusando los malos datos y en las últimas horas ingresaron en planta 34 personas, 27 menos que el viernes que registró máximos equiparables a los del mes de mayo. Sin embargo, siguen incrementándose los pacientes en las UCI, hasta alcanzar los 55, tres más que en la jornada previa.

Por territorios, el sábado se detectaron 635 nuevos positivos en Bizkaia, 306 menos que el viernes, otros 367 en Gipuzkoa (84 menos que en la jornada anterior) y Araba contabilizó 177 nuevos contagios (27 menos que el día previo). A ellos, se suman 27 infecciones entre personas con residencia fuera de la CAV, frente a los 42 del anterior balance.

La situación de la pandemia no es mucho más alentadora en Nafarroa, donde fallecieron en la última jornada dos mujeres de 63 y 61 años a consecuencia del covid. La comunidad foral registró el sábado 363 nuevos contagios tras realizar 2.537 pruebas, con lo que la positividad se sitúa en el 14,3%.

El sábado de la semana pasada se registraron 335 casos (13,4% de positividad), el domingo 399 (16,3%), el lunes 439 (14,2%), el martes 459 (14,9%), el miércoles 434 (13,6%), el jueves 447 (14,5%) y el viernes 441 (15%).