DONOSTIA - La incidencia de la covid-19 en Euskadi ha bajado ya de los 150 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días y se ha situado en 146,52, lo que abre la posibilidad de que las instituciones suavicen las restricciones vigentes en ámbitos como la hostelería y el ocio nocturno al pasar a un escenario de transmisión moderada.

La entrada en la fase de transmisión moderada (entre 60 y 150 casos) implicaría, según el Plan Bizi Berri III que se suavicen las restricciones aprobadas el pasado 31 de mayo por el Consejo Asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI), aunque para ello debe reunirse de nuevo este órgano institucional, previsiblemente esta semana o a principios de la próxima.

El portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, ha manifestado este martes tras la celebración del Consejo de Gobierno que Iñigo Urkullu decidirá convocar el LABI una vez se confirme la mejoría de la situación epidemiológica.

De confirmarse y optar por una flexibilización de las restricciones, son varias las medidas que se podrían tomar. Así, esta nueva fase, tras meses en la de transmisión tensionada, podría suponer un alivio en las medidas que afectan a la hostelería, tanto en horarios como en número de comensales por mesa y aforos.

Además, una posible flexibilización podría suponer también la reapertura de las sociedades gastronómicas y el aumento de los aforos en comercios y actividades deportivas. El documento también permite que se analice la apertura del ocio nocturno.