- En la medida que avanza el lobo, los ganaderos retroceden, y se preguntan qué posición adoptarán los consistorios a la hora de articular una respuesta. Las organizaciones agrarias ENBA y EHNE han presentado de manera conjunta en todos los ayuntamientos del territorio una moción en defensa de la ganadería extensiva y el control poblacional del lobo. De lo contrario, alertan, "la convivencia es imposible" en los términos que hoy por hoy se plantean.

Así lo pone de manifiesto la integrante de ENBA Inma Iriondo. "Ni mucho menos queremos acabar con la especie animal. Lo que hace falta es un mayor control, pasar de las palabras bonitas a asumir la realidad. Y la realidad nos dice que si el lobo sigue avanzando, la ganadería extensiva de montaña no será posible", asegura esta profesional.

El punto de inflexión se remonta al 13 de marzo de 2020, con la modificación del Catálogo Vasco de Especies Amenazadas, que incluye a este animal. El mes pasado, el 4 de febrero, el consejo asesor del Patrimonio Natural del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico también decidió incluir al lobo en el listado de especies silvestres de protección especial. Fue un paso adelante "a pesar del voto contrario" de los representantes autonómicos de las comunidades que representan más del 95% del censo de lobos, según subrayan desde las organizaciones agrarias. La inclusión de estas poblaciones en el listado de protección especial supondrá que el lobo deje de ser especie cinegética, una vez que la orden sea publicada en el Boletín Oficial del Estado.

Ante esta situación, las organizaciones agrarias buscan el respaldo de todos los ayuntamientos del territorio. Juzgan "imprescindible" recabar el apoyo de todos los partidos en defensa de la ganadería extensiva. "Si la decisión fuese definitivamente adoptada", las consecuencias para la ganadería extensiva de Euskadi "serían graves e inmediatas", según alertan. "Aumentaría la población de lobos en las comunidades limítrofes y con ello se incrementaría el grave riesgo de que los lobos entren y se estabilicen en Euskadi". El resultado sería nefasto, tanto para la ganadería extensiva como para la oveja latxa, según denunciaron ayer las organizaciones en una rueda de prensa en Donostia. "Los ganaderos están preocupados. Temen que la expansión del lobo pueda suponer el fin del manejo extensivo, por lo que nos veríamos abocados a un manejo intensivo de la ganadería", advierten.