La Diputación de Gipuzkoa ha asegurado que la vacunación de cerca de 8.000 usuarios y trabajadores de la red foral de servicios sociales "está garantizada" y se hará de "manera rápida" en cualquiera de los recursos disponibles, entre los que se baraja también el estadio Anoeta.

La portavoz foral, Eider Mendoza, ha insistido este martes en una rueda de prensa que lo más relevante en este momento es "recibir la vacuna y no tanto dónde se vaya a inocular". "Tenemos todos nuestros recursos preparados para ello, lo más importante es recibir la vacunación, da igual dónde", ha recalcado Mendoza, al tiempo que ha asegurado que el proceso de inoculación será "rápido" una vez de que haya "luz verde" y "todas las garantías de seguridad" para retomar el proceso con AstraZeneca.

Ha dicho que la institución foral cuenta con "recursos suficientes para inocular" la vacuna, aunque está trabajando también con la Real Sociedad para usar otros espacios.

El proceso de vacunación en la red de servicios sociales de la Diputación de Gipuzkoa continúa estos días con el suministro de la segunda dosis de Pfizer a usuarios de centros de día, discapacidad y salud mental, un colectivo que ronda las 2.835 personas.

Las residencias de Gipuzkoa, donde ya terminó la inmunización, continúan sin casos positivos entre sus usuarios desde el pasado 26 de febrero, mientras que en estos momentos hay dos casos activos entre los trabajadores de sendos geriátricos.

Mendoza se ha referido asimismo, a preguntas de los periodistas, a la presencia de ciudadanos franceses en diferentes localidades guipuzcoanas por motivo de ocio o compras y ha reconocido que la Diputación de Gipuzkoa "no tiene capacidad" de actuar. En principio, "el cumplimiento de las medidas de protección y movilidad" atañen a los residentes en la Comunidad Autónoma Vasca aunque la "lógica" dice que deberían aplicarse a todas las personas, ha reconocido Mendoza, quien ha apelado a la "responsabilidad individual y colectiva" para hacer frente a esta pandemia mundial. También el alcalde de Donostia, Eneko Goia, se ha referido a esta situación "incoherente" que es "difícil de entender".