Un mes y medio. Eso es lo que ha necesitado Donostia para abandonar la zona roja en la que ingresó el fin de semana del 24 y 25 de octubre. El último informe hecho público por Osakidetza sitúa a la capital guipuzcoana en 495,95 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, lo que supone un primer respiro en una bajada a la que le quedan semanas, ya que Donostia sigue en zona naranja.

Arrasate, Eibar y Ordizia son los tres municipios de más de 5.000 habitantes que superan los 500 casos, ya que Bergara también sale por poco de la zona señalada, al registrar un índice de 499 diagnósticos acumulados en las últimas dos semanas. El conjunto del territorio histórico pudo salir de la zona roja hace cuatro días.

En pleno debate sobre la posibilidad de relajar algunas de las restricciones contra el coronavirus (las autoridades tampoco han cerrado la puerta a mayores restricciones), Gipuzkoa ha sumado en las últimas horas 145 positivos, lo que supone 41 más que los que se conocieron el lunes. La tasa del territorio guipuzcoano se sitúa en 405,75 casos, frente a los 284 de Bizkaia y los 354 de Araba.

Un tercio de los más de 140 positivos se concentran en dos municipios, que son los únicos que registran cifras de dos dígitos. Por un lado, la capital donostiarra, con 37 positivos y por otro, Arrasate, cuyo caso preocupa de manera especial, ya que el índice baja, pero supera los 1.300 casos acumulados por 100.000 habitantes. En la última semana, las autoridades sanitarias han diagnosticado 138 nuevos positivos en la villa cerrajera, 22 de ellos este lunes.