- Con el objetivo de prevenir complicaciones en el sector más vulnerable de la población, los 5.425 usuarios de las residencias de ancianos de Gipuzkoa comenzaron ayer a ser vacunados contra la gripe estacional. De esta forma, estos centros han adelantado una semana la campaña de vacunación con respecto a la campaña oficial -que comenzará el próximo martes, día 13- a fin de evitar contagios de gripe entre los residentes.

Según informaron ayer fuentes del Departamento de Políticas Sociales, Osakidetza comenzó ayer con la vacunación de los primeros usuarios y se espera que, en los próximos días, el conjunto de usuarios de las residencias de ancianos de Gipuzkoa estén ya inoculados.

Según un estudio financiado por la agencia británica de sanidad PHE, cuando las personas de edad avanzada sufren las dos enfermedades a la vez, se disparan las probabilidades de fallecer frente a aquellos que se contagian únicamente de COVID-19. Este estudio analizó 20.000 casos de personas infectadas con los dos virus, de los que se concluyó que el 43% fallecía, frente al 27% de mortalidad existente entre quienes sufren coronavirus. Es por ello que este año la vacunación contra la gripe entre los sectores más vulnerables de la población es más importante que nada.

Tras la experiencia de los 168 fallecimientos que se cobró la pandemia durante la primera oleada del virus, y con la vista puesta en la amenaza de la gripe durante el otoño, la Diputación de Gipuzkoa activó en verano un Sistema de Vigilancia y Alerta para hacer frente al virus en sus recursos sociales con la prevención, la anticipación y la rapidez de respuesta como ejes principales.

Este plan, que consta de siete medidas específicas, contempla, además de la revisión de los protocolos de prevención y control de los propios centros, la adopción de una serie de medidas que buscan reducir el impacto del COVID-19 en la red de recursos sociales del territorio. Y entre ellas, destacan la realización masiva de pruebas PCR tanto a usuarios como a trabajadores de estos centros, alcanzando las 800 pruebas semanales.

Con respecto a la situación en estos centros, tras una semana pasada difícil por el elevado número de contagios, la Diputación informó ayer de que no se han registrado nuevos fallecimientos en los últimos seis días, ni nuevos positivos en los últimos tres.

Así las cosas, actualmente hay 62 casos activos de COVID-19 que se reparten entre cinco de los 65 centros del territorio. La residencia Alai-Etxe de Donostia, con 25 casos, es la que más positivos concentra, seguida muy de cerca por Mizpirualde de Bergara, con 23. Santa María Magdalena de Hernani suma nueve casos activos; Sagrado Corazón de Errenteria, cuatro; y La Paz de Donostia, uno.

Entre los afectados hay once personas hospitalizadas, mientras que otras 40 están siendo atendidas en la planta social del Hospital de Eibar, el centro de referencia para la atención de casos COVID-19 derivadas de las residencias.

Asimismo, según ha podido saber este periódico, la residencia San José de Ordizia reabrirá sus puertas en los próximos días para acoger a usuarios de las residencias contagiados de coronavirus que se encuentren en situación leve o asintomática.

Desde que se dieron los primeros positivos el pasado 11 de agosto, 45 personas mayores han superado la enfermedad y 25 han fallecido.

En las residencias no se han registrado nuevos fallecimientos en los últimos seis días, ni nuevos positivos en los últimos tres