Donostia - Por cuarto año consecutivo, varios bertsolaris acudirán a diferentes residencias de mayores de todo el territorio con el objeto de mejorar su calidad de vida y sus capacidades psicoemocionales. En total, este año serán catorce residencias -tres más que el pasado año-, las que reciban las actuaciones a través del proyecto Adin-adin, que comienza hoy en Lazkao.
Así lo explicó ayer a través de un comunicado la Diputación, indicando que a la nueva edición se han sumado las residencias San Juan de Segura y Zestoa y el centro de día Puntapax de Usurbil.
“A través de los bertsos se motiva a los mayores a que participen y mejora la relación entre ellos”, indicó en el texto la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, para quien sería “interesante” conocer qué efectos terapéuticos tiene el programa.
Adin-adin pretende aprovechar todo el potencial lúdico y terapéutico de los bertsos y hacerlo llegar a las residencias. Por este motivo, a cada lugar acuden dos bertsolaris de la zona, uno más joven y otro mayor, para poder así hablar de temas cercanos a cada oyente.
Uno de los bertsolaris que participa en el proyecto, Sebastian Lizaso, comentó que muchos de los ancianos con únicamente verle “ya tienen muchos recuerdos en su mente”. “Uno te comenta que estuvo en tal actuación y otro te dice que en una ocasión estuvo junto a mi padre”, señaló el bertsolari.
Asimismo, Lizaso indicó que antes de empezar los bertsos siempre charla con ellos para recibir información sobre los otros residentes y utilizarla. “Cuando empezamos a cantar vemos cuándo se ríen y cuándo cierran los ojos. Son muy agradecidos”, observó.
