La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha afirmado que en el hospital de Santa Marina, además de su director gerente, José Luis Sabas, también fueron vacunados contra el Covid cuando no les correspondían, otros directivos y 16 personas no adscritas al centro, como cuatro representantes sindicales, otras cuatro personas de servicios religiosos o cuatro más de personal que explota la cafetería, entre otros.

Sagardui ha asegurado que hasta el 19 de enero no supo nada de la vacunación irregular. Al respecto ha explicado que "a última hora de la tarde, un medio de comunicación se pone en contacto con el Departamento de Salud trasladando que, según una denuncia del sindicato ELA, en el Hospital de Basurto se vacunó antes a jefes intermedios que al personal que atiende a enfermos Covid".

"El 20 de enero iniciamos la recogida de información para saber qué había ocurrido en Basurto y en Santa Marina", ha precisado.

En Basurto se habrían inoculado cuatro vacunas supuestamente sobrantes y Sagardui ha apuntado que "habría sido más adecuado haber ofrecido la vacunación a personal de la UCI" u otros profesionales que interactúan más con pacientes.

Sagardui, que ha comparecido ante el Parlamento Vasco para informar de la situación epidemiológica de la pandemia del coronavirus, ha dado explicaciones sobre la investigación realizada en torno a la vacunación irregular detectada en los hospitales bilbaínos de Basurto y Santa Marina de sus gerentes, Eduardo Maiz y José Luis Sabas, que se vieron obligados a dejar sus puestos al haberse saltado los criterios establecidos por Osakidetza, ya que en ellos no se incluían cargos directivos.

Tras señalar que su Departamento ha revisado los protocolos de vacunación, que son "estrictos", y ha vuelto a emplazar a cumplirlos, ha indicado que los directores de los centros hospitalarios no atienden a pacientes.

"La vacunación masiva en Santa Marina fue un error"

En relación a la situación en el hospital de Santa Marina, ha reconocido que "fue un error". Ha indicado que no sabía que se habían solicitado vacunas "para todo el personal", pero ha señalado que "lo relevante es qué se hizo con parte de la vacunas".

En este sentido, ha precisado que una de las vacunas se destinó al director gerente, varias al resto del personal directivo y 16 a personas que no corresponde, algunas de las cuales "incluso no son personal adscrita al centro".

En concreto, ha precisado que, entre ellas, cuatro representantes de sindicatos que se encontraban en una reunión, cuatro personas externas pertenecientes a servicios religiosas, cuatro personas externas pertenecientes a la persona que explota la cafetería, dos personas externas de la empresa de vending y otras dos externas de una empresa de mensajería paquetería.

Según ha indicado, este "mal uso" de parte de las dosis recibidas, unido a lo "poco ejemplar que resulta que los altos cargos utilicen vacunas destinadas a personas vulnerables o expuestas" es lo que ha tenido como resultado la exigencia de responsabilidades al gerente.

Sagardui ha explicado que, en los días previos al inicio de la vacunación del personal sanitario, distintos responsables de Santa Marina habían propuesto que este centro fuera objeto de una vacunación "masiva".

La consejera ha señalado que en Santa Marina se concluyó que sería la totalidad del personal que atiende a pacientes, "sea cual fuera su naturaleza". "A partir de aquí, para los responsables del Departamento y Osakidetza, consejera, viceconsejero, viceconsejera, directora general y el resto de directores, en lo que a Santa Marina se refiere, la totalidad era la totalidad de las personas que atienden directamente a personas ingresadas, siguiendo el protocolo establecido, nunca toda la plantilla de una vez", ha precisado.

CCOO cesa a la delegada que se vacunó de forma irregular

CCOO de Euskadi ha cesado de sus funciones a la delegada del sindicato que se vacunó de la covid-19 de forma irregular en el hospital de Santa Marina. La central sindical ha dado a conocer esta destitución, tras la comparecencia en comisión en el Parlamento vasco de la consejera de Salud, Gotzone Sagardui.

En un comunicado, CCOO ha informado de que ha tenido conocimiento este miércoles de la vacunación "indebida" de esta persona, que tenía la responsabilidad sindical de visitar centros hospitalarios y de asesorar a sus trabajadores, entre otros, del hospital de Santa Marina de Bilbao.

Por ello, ha decidido cesarla, ya que "saltarse el protocolo de vacunación es un hecho de la gravedad suficiente como para tomar las medidas necesarias". "Este mismo nivel de exigencia para quienes representan a Comisiones Obreras, se va a trasladar a la Consejería de Salud del Gobierno vasco a la hora de aclarar los protocolos de vacunación y demandar la transparencia necesaria en su ejecución", ha asegurado.

Por su parte, ELA y UGT han defendido que sus representantes recibieran la dosis de Pfizer, ya que como apuntan, "se le indicó que el criterio a seguir en Santa Marina era el de vacunar a toda la plantilla" y LAB ha informado de que su delegado no se vacunó.