Lasarte-Oria denuncia que la sentencia del Supremo ataca la igualdad lingüística

El pasado mes de junio el Tribunal Supremo anuló un requisito de la ordenanza de subvenciones de este Consistorio al considerar discriminatoria la obligación de que las actividades dirigidas a menores de 16 años se desarrollen exclusivamente en euskera.

En una declaración institucional dada a conocer este lunes, el Consistorio lasarte-oriatarra explica que, aunque respeta esta sentencia del Supremo, "no está de acuerdo con las razones aducidas" porque, "más allá del respeto debido" a cualquier resolución judicial, el texto "no toma en consideración las atribuciones de los ayuntamientos en materia de política lingüística y atenta contra el principio básico de igualdad lingüística".

"Desde su creación en 1986, uno de los pilares de la política lingüística del Ayuntamiento ha sido conseguir que las nuevas generaciones sean lo más bilingües posibles", recalca la nota, que destaca el fomento del "modelo D" promovido por el consistorio en este tiempo, así como el "gran esfuerzo" realizado "para ofrecer actividades extraescolares en euskera".

"Cuando en el año 2017 el Ayuntamiento elaboró la ordenanza reguladora de las subvenciones para las asociaciones locales, puso la condición ahora derogada por el Tribunal Supremo de que, si la actividad estaba dirigida a menores de 16 años, sería en euskera", recuerda ahora la nota.

Una decisión que adoptó, según indica, basándose en la Ley de Instituciones Locales de Euskadi, en que "todos los niños y jóvenes del municipio son capaces de realizar actividades en euskera fuera del horario lectivo" y en que, a todos ellos "les conviene que las actividades fuera del horario lectivo" se realicen en este idioma.

Recalca, en este sentido, que desenvolverse en euskera, "en el ámbito que les gusta" fuera de las clases, "les ayuda a adquirir esta lengua de forma más sólida y, por tanto, a ser bilingües más completos".

Algo, que resulta "especialmente conveniente en el caso de aquellos que, además del centro escolar, no tienen la posibilidad de expresarse en euskera en la familia o tiene más dificultades para hacerlo".

Por todo ello, el Ayuntamiento anuncia que "mantendrá el objetivo y la política lingüística establecida desde su creación y preparará dos vías para alcanzar dicho objetivo" mediante "medidas de fomento" y "medidas legales".

Aclara, a este respecto, que "aunque la sentencia del Tribunal Supremo deroga la condición establecida en la ordenanza, el Ayuntamiento está colaborando con la Diputación Foral de Gipuzkoa (que ya criticó el fallo) y el Gobierno Vasco" para "determinar cuál será la fórmula más correcta para sustituirla".