- Estamos ante una campaña electoral anómala. ¿Cómo la está viviendo?

-Estamos ante una situación que descoloca a todo el mundo. La pandemia ha atravesado nuestras vidas, nuestros cuerpos y hacer campaña en estas condiciones es complicado para partidos como EH Bildu, para el que la cercanía, con su militancia y con la ciudadanía, es un sello de identidad. Todavía tenemos mucha incertidumbre, cada día nos vamos enfrentando a situaciones muy diferentes en las que tienes que irte recolocando y eso tiene su plasmación en la campaña, las expectativas que la gente tiene e incluso las ganas o la necesidad que tienen de ir a votar.

La pandemia ha reducido la agenda de temas durante esta campaña. ¿Cuáles cree que han quedado enterrados y que deberían abordarse de forma prioritaria la próxima legislatura?

-Creo que las experiencias vitales de esta pandemia han sido tan políticas que casi todos los temas se ven atravesados por lo que hemos vivido. Desde luego los temas vinculados con la salud, los servicios públicos, la educación y qué va a pasar con los niños a partir de septiembre; todo el sistema de protección, el ámbito de los servicios sociales, que no se menciona más allá de las residencias. Adquiere relevancia además, todo el tema presupuestario, porque necesitamos las herramientas suficientes para poder proteger y responder a las necesidades que plantea nuestra ciudadanía. También necesitamos otra relación con el Estado, una relación de igualdad, porque de la noche a la mañana, eso que lleva 40 años sin terminar de cumplirse desaparece a golpe de decreto.

En este escenario, ¿cuáles deben ser las prioridades del próximo Gobierno?

-Fortalecer los servicios públicos, porque hemos padecido las consecuencias de que la inversión en los servicios públicos haya perdido peso con respecto al Producto Interior Bruto. Lo hemos visto en Educación y en Sanidad. Hemos visto también la necesidad de que las plantillas tan eventuales que tienen los servicios públicos se puedan estabilizar y pueda haber unas nuevas OPEs, limpias y sin irregularidades. Para nosotros también es prioritario todo el tema de la reactivación de la economía, hacer un planteamiento muy serio de la protección del empleo. Prioridad también todo el tema vinculado a una articulación nueva de los servicios sociales y la garantía de ingresos. Junto con, clarísimamente, la necesidad de abordar el nuevo estatus y el derecho a decidir.

Si EH Bildu estuviera en el Gobierno, ¿cuál sería la primera medida que aprobaría?

-Seguramente tendría que ver con el paquete de medidas que ya presentamos al lehendakari Urkullu y que estaban vinculados con estos temas: las decisiones que hay que tomar de inmediato para poder levantar este país y ponerlo a andar en una nueva dirección. Reforzamiento de los servicios públicos para prepararlos, por ejemplo, para una segunda oleada del COVID en el caso de la Sanidad; reforzar la atención primaria, que es fundamental para poder vivir como vamos a tener que vivir con este virus; reforzar la educación para que nuestros hijos puedan ir a la escuela con seguridad y aumentar la plantilla en unos 10.000 profesores; y, sobre todo, garantizar una protección a todas las personas que están en ERTE, que son autónomas, que han visto reducidos sus ingresos. Creo que la protección de las personas y los cuidados dignos van a ser fundamentales y también el abordar una inversión sin precedentes en las residencias de mayores para que podamos estar preparados para una posible segunda oleada sin tener que encerrar a nuestros mayores ni que tengan que morir en soledad.

El COVID ha puesto en jaque el sistema sanitario. ¿Cómo valora la respuesta que la sanidad vasca ha dado a esta epidemia?

-Entendemos que las decisiones políticas de los últimos años, el no invertir suficiente en Sanidad, los recortes que se han dado, la precariedad con ese 40% de temporalidad, han condicionado totalmente la respuesta que ha podido dar Osakidetza a la pandemia. Además hemos visto falta de liderazgo, falta de anticipación. El Gobierno de Urkullu no ha querido trabajar con la oposición ni generar espacios de responsabilidades compartidas. No ha escuchado a nadie. El lehendakari Urkullu ha llamado dos veces a Maddalen Iriarte y ha sido para hablar de elecciones. Consideramos que este tipo de situaciones requieren otro tipo de gobernanza.

Uno de los momentos más simbólicos de estos meses ha sido el aplauso sanitario de las 20.00 horas. ¿En qué debe traducirse la próxima legislatura?

-En políticas públicas, en acabar con la precariedad en Osakidetza, en estabilizar los puestos eventuales y crear 7.000 puestos más con OPEs limpias, y sobre todo en que podamos mejorar o complementar lo que ocurre en la atención primaria, donde hay que ampliar plantillas, formarlas y desburocratizar.

Las encuestas dan por hecho un Gobierno de coalición entre el PNV y el PSE. ¿Cuál es su vaticinio?

-En este país estamos muy acostumbrados a que las encuestas tengan la misión que tienen. Nosotras entendemos que la partida todavía está muy abierta. Hay mucha incertidumbre y veremos qué pasa, porque esta pandemia nos ha dejado vivencias muy políticas y la gente ha reaccionado. Veremos en qué se traduce.

¿Les preocupa la abstención?

-Lo que nos preocupa es que este país pueda estar en condiciones a partir del 13 de julio de levantarse y andar en otra dirección.

Podemos insiste en un Gobierno tripartito.

-Para nosotros la cuestión no es tanto con quién sino para qué. Estamos en un momento muy concreto, entendemos que este país tiene que levantarse y andar en otra dirección, no podemos olvidar todo lo que ha pasado y volver a la casilla de salida y nuestra puerta siempre va a estar abierta para poder hablar de los retos de país que tenemos y cómo mejorar la calidad de vida de las personas, ver cómo afrontamos esta crisis que nos viene.

Gipuzkoa, en principio, es el terreno más abonado para EH Bildu. ¿Cómo explica la fortaleza del PNV en las últimas citas electorales, que las encuestas preven que pueda repetirse?

-No tengo una explicación en ese sentido. Lo que sé es que tenemos posibilidades reales de revertir esa situación.

¿Dónde están las claves para superar al PNV esta vez?

-Transmitir con claridad lo que nos estamos jugando, trasladar que EH Bildu está preparada, que hemos tenido que gestionar esta pandemia en muchos municipios, que lo hemos hecho poniendo a las personas en el centro, trabajando con las comunidades, con el consenso de todas las fuerzas políticas porque ese es nuestro modelo de gobernanza y es crucial para afrontar todo lo que nos viene ahora encima.