Donostia - El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, tuvo ayer que salir a responder ante la tormenta de críticas que ha recibido el Gobierno español por el traspaso de las competencias de Tráfico al Ejecutivo de Nafarroa. Esta transferencia está recogida en el punto tercero del acuerdo recién firmado entre PSOE y PNV para la investidura de Pedro Sánchez y ha sido criticada por los partidos de la derecha porque consideran que abre la puerta a la salida de la Guardia Civil de la Comunidad foral. El titular de Interior negó que las policías españolas vayan a marcharse y a renglón seguido reprochó a PP y Unión del Pueblo Navarro (UPN) que en 1997 los entonces presidentes español y navarro, José María Aznar y Miguel Sanz, acordaron la transferencia de esta competencia, e incluso llegaron a fijar fecha para ejecutarla, en 2001, aunque finalmente no se llevó a cabo.

Marlaska devolvió así la acusación a los partidos de derecha recordándoles que también ellos intentaron devolver a la Policía foral navarra la competencia de Tráfico retirada durante el franquismo. "Si se remiten a las hemerotecas, el presidente Aznar y el presidente Sanz, de UPN, hablaron del traspaso de las competencias", recordó el ministro para tratar de frenar las duras críticas de estos dos partidos, así como de Ciudadanos y de Vox, calificándoles incluso de "traidores".

Traspaso En meses Por su parte, el proceso por el que Nafarroa asumirá la competencia de Tráfico y Seguridad Vial se fijará en los próximos meses, siempre y cuando prospere la investidura de Pedro Sánchez. Son los cálculos que hace el vicepresidente del Gobierno foral, Javier Remírez, en una carta remitida al Grupo Noticias. La misiva también sale al paso de la polémica generada por la derecha respecto al hecho de que sea el PNV el que incluya una petición navarra, asunto que Remírez enmarca dentro de la "práctica política absolutamente habitual" de la derecha.

Critica por ello lo que considera una "pataleta pueril", un discurso "absolutamente irresponsable" y "carente de veracidad" que además "desautoriza y contradice su propia trayectoria". - H.U./A.I.